La ultima actividad de la asignatura consiste en situar las lineas de accion a seguir con respecto a las delimitaciones con los otros paises del Caribe los cuales no hemos tocado durante clase. Los comentarios pueden ser publicados has el dia miercoles 17 de Diciembre hasta las 11:59 pm. Se les agradece realizar la publicacion del comentario en esta entrada
54 comentarios:
Caribe.
Carhil Antonieta Martínez Marrero
Realizar una propuesta de negociación entre Venezuela y el Caribe no resulta una tarea sencilla. Se trata de algo sumamente complejo que sólo un buen negociador podría hacer.
Sin embargo, humildemente, intentaré aventurarme en la tarea por ser uno de los objetivos de la cátedra de Historia de Las Relaciones Internacionales III y porque me resulta interesante todo el tema de fronteras.
Un buen internacionalista y un buen negociador debe estar atentos ante las divergencias culturales entre algunos países de Caribe que fueron colonizados por Inglaterra y Venezuela que fue colonizada por España.
El factor cultural es determinante en las negociaciones internacionales, valdría la pena analizar los diferentes modos de expresarse y los factores culturales de los actores involucrados. Es por esto que durante una negociación no sólo se toman en cuenta los temas jurídicos.
En el Caribe pueden existir percepciones del mundo, de la historia y de la vida distintas a la Venezolana ; por tradiciones culturales y diplomáticas inglesas; los ingleses poseen una visión diferente de lo que representa el espacio marítimo por ser el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del norte una península. Vale la pena destacar la larga tradición marítima inglesa que comenzó a robustecer su aparato naval con Enrique VIII en el siglo XVI.
Pienso que históricamente el Caribe fue fragmentado por las potencias coloniales que despedazaron su geografía y provocaron allí huracanes demográficos, divisiones lingüísticas, separaciones políticas y muros económicos.
Pero desde mi punto de vista , actualmente, se están derribando las fronteras internas que antes dividían a los países del Caribe y que eran difíciles de traspasar y que hacían de cada isla un espacio socio-cultural fragmentado.
Lo antes expuesto lo sustento en las recientes declaraciones de Raúl Castro:
“Recordemos que de la victoria de Venezuela depende, en gran medida, la victoria de América Latina y El Caribe, nuestra admiración y amor por Venezuela y Cuba, países que han marchado unidos por la libertad de los pueblos”, sostiene el presidente de la República de Cuba.
Quisiera destacar entre las propuestas de negociación entre Venezuela y el Caribe, debemos celebrar y apoyar avances hechos para desarrollar un anillo energético en la región (objetivo estratégico de la propuesta de cooperación Petrocaribe).
Iniciativas como deberían proliferar. Para un país que depende en gran manera de la renta petrolera y que tiene una larga vinculación con la explotación de hidrocarburos, llevar a cabo iniciativas como esta con el Caribe es de gran trascendencia. Además no sólo se fortalecen y estrechan lazos con países del Caribe, si no que, también nos abrimos a nuevos socios comerciales que aminoran nuestra dependencia del mercado norteamericano como sitio primordial para colocar las exportaciones de nuestro crudo.
Según Gustavo Márquez, ministro venezolano para la Integración y el Comercio, tras la firma de los convenios bilaterales se suscribirá un convenio marco para respaldar el desarrollo mediante un fondo de Petrocaribe. Esos recursos serán destinados a programas de cooperación bilateral de impacto social, orientados a buscar la complementación económica.
El modelo de negociación que se debe plantear, en mi humilde opinión, debe: resolver las asimetrías en el acceso a los recursos energéticos, coordinar las políticas de energía y fomentar la cooperación tecnológica entre el Caribe y Venezuela. Basado en los ideales socialistas de contribuir a la formación de sociedades más justas, culta, participativa y solidaria. Eliminando de las desigualdades sociales.
Como dijo Raúl Castro: 'Hoy ratificamos el compromiso de Bolívar y estoy convencido de que mucho de lo que empezó aún está por hacer. Nos corresponde a nosotros, a nuestros hijos y nietos, asumir ese compromiso'.
Pero opino que en el Caribe la integración local debe efectuarse antes de la integración regional e incluso antes que la interregional, si la primera no se hace no será fácil que la otra se realice. Lo que podría entenebrecer los avances de negociación entre Venezuela y el Caribe.
Considero importante mencionar, una parte de los antiguos tratados a los que Venezuela ha llegado con países del Caribe:
Ø Venezuela en 1942, firmó un tratado con Gran Bretaña para definir sus límites con la isla de Trinidad.
Ø En 1991, firmó otro acuerdo con el Estado deTrinidad-Tobago que se había independizado de Inglaterra en 1962.
Ø Para fijar sus delimitaciones con Monserrat y con Redonda Venezuela tuvo que dialogar con Inglaterra. Lo mismo que con Francia para delimitar sus fronteras con Guadalupe y Martinica, tomando como punto de referencia su posesión de la Isla de Aves.
Ø También lo hizo con los Estados Unidos en relación con Puerto Rico y las Islas Vírgenes .
Ø Con relación a las Antillas Neerlandesas (Curazao, Bonaire, Saba y San Eustaquio), Venezuela tuvo que negociar con Holanda.
Ø También Venezuela negoció con República Dominicana, Dominica, Granada, Saint. Vincent y Saint. Lucia.
Ø Pugna entre Colombia y Venezuela por el archipiélago de Los Monjes.
Carhil Antonieta Martínez Marrero
CI 16.706.881
Continuará...
Susana Ortega
C.I.- 16.429.274
El Mar Caribe ha sido calificado como mar semicerrado o mar marginal, esto debido a sus condiciones geomorfológicas y estructurales, determinadas por el arco de islas que lo rodean, a los efectos de la Convención de Derechos del Mar en su articulo 122 se entiende por mar cerrado a semicerrado, un golfo, dársena, o mar rodeado por dos o mas Estados y comunicado con el mar abierto por una salida estrecha o consistente enteramente o fundamentalmente en mares territoriales y zonas económicas exclusivas de dos o mas Estados ribereños.
Esta condición exige de los Estados ribereños un grado de cooperación en el ejercicio de sus derechos y obligaciones, específicamente en la ordenación, conservación, exploración y explotación de los recursos vivos del mar, protección y preservación del medio marino y en la investigación científica, auspiciando programas conjuntos.
Como consecuencia de la condición del Mar Caribe de mar semicerrado se hace necesario determinar los limites marítimos de Venezuela con una serie de países como Colombia, República Dominicana, Países Bajos, entre otros. La unión de los puntos que representan las diferentes áreas a delimitar conforma una aproximación de la línea media del Caribe.
El objeto de la delimitación de áreas marinas y submarinas entre Venezuela y los Estados Unidos consistió en la delimitación entre nuestra isla de las aves y las islas bajo jurisdicción norteamericana, Puerto Rico y Santa Cruz.
La frontera marítima entre Venezuela y los Estados Unidos esta determinada por líneas que unen veintidós puntos que abarcan una extensión aproximada de 298,7 millas náuticas. Esto se realizo mediante un tratado de delimitación de fronteras marítimas suscrito el 28 de mayo de 1978, la línea limítrofe acordada establece explícitamente la obligación de ambos gobiernos de no reclamar ni ejercer, con propósito alguno derechos soberanos o jurisdicción al otro lado de la línea limítrofe, a su vez el tratado reconoce la totalidad de las áreas marítimas de todas las islas venezolanas involucradas, isla de las aves, archipiélago de aves, archipiélago los Roques.
Desde el punto de vista geográfico las áreas a delimitar entre Venezuela y los Países Bajos están comprendidas entre Aruba, Bonaire, Curazao y las islas neerlandesas Saba, San Eustaquio y San Martin y el territorio continental venezolano, así como las islas pertenecientes a nuestro país.
El inicio de los contactos formales entre Venezuela y los Países Bajos se produce oficialmente el 4 de abril de 1978 con motivo de un Aide Memoire presentado por el Embajador de Holanda a la Chancillería Venezolana expresando el deseo de iniciar negociaciones para la delimitación de áreas marinas y submarinas, esto resulto en un tratado de delimitación de áreas marinas y submarinas que constituye el conjunto de orientaciones, propósitos y principios, las líneas de delimitación establecidas entre los partes constituyen los limites de sus mares territoriales, zonas económicas exclusivas o cualesquiera áreas marítimas que han sido o que pudieren ser establecidas por las partes, de conformidad con el derecho internacional. En la delimitación se aplicaron los principios equitativos del trazado de las diferentes líneas limítrofes, combinados con una pluralidad de métodos de delimitación de acuerdo a la variedad de circunstancias geográficas, la distribución de áreas refleja razonablemente el criterio de proporcionalidad.
Andrea Figueroa Ravell.
C.I: 17.775.675
La exitosa negociación de las áreas marinas y submarinas con los Estados Unidos de América en 1978, puede ser tomada como antecedente para la negociación definitiva de las fronteras marinas venezolanas con los Estados Caribeños del frente este; siendo necesarias para un desarrollo integral de nuestro país con estas naciones.
La obligación de ambos Gobiernos (venezolano y su par caribeño) de no reclamar ni ejercer, con propósito alguno, derechos soberanos o jurisdicción al otro lado de la línea limítrofe marina, podría ser un punto a negociar por el Estado venezolano con los gobiernos de Grenada, San Vicente y las Grenadinas, Santa Lucía, Dominica, Monserrat y St. Kitts-Nevis.
El antecedente con los Estados Unidos reconoce la totalidad de las áreas marítimas de todas las islas venezolanas involucradas con su contraparte (mar territorial, zona económica y plataforma continental), manteniendo las diferencias geográficas y económicas que las caracterizan y consolidando el control venezolano de las áreas marinas que le corresponden, lo cual aumenta el dominio sobre el espacio marino existente entre los territorios insulares venezolanos y la masa continental.
En caso de surgir un conflicto sobre la interpretación o aplicación del tratado, se contempla en el mismo que se resolverá mediante negociaciones directas entre los respectivos Gobiernos, garantizando la solución bilateral sin intervención de un tercer Estado u Organismo Arbitral; consolidando la Tesis Tradicional de Venezuela favorable a la negociación directa como el método más apropiado y conveniente para la solución de controversias entre las partes.
El método de demarcación aplicado mediante el Tratado de Delimitación de Fronteras Marítimas, entre la República de Venezuela y los Estados Unidos de América hace 30 años, fue orientado por la necesidad de establecer límites marítimos precisos y equitativos, utilizando una línea equidistante entre las diferentes Islas involucradas. Revelando que el método de delimitación depende de las circunstancias de cada caso, por lo que no es admisible la aplicación anticipada de un método único a todos los casos de manera automática y obligatoria. Es por ello, que la posición de Venezuela no excluye ningún método, pero sí el de aplicar el que sea más conveniente y apropiado al caso concreto.
Es paradójico observar cómo si en 1978 pudimos resolver de manera efectiva y pacífica diferencias limítrofes con los Estados Unidos de América, sin afectar nuestros intereses territoriales, cómo es posible que 30 años después no hemos sido capaces de llegar a un acuerdo con pequeños Estados Caribeños que no representan ninguna amenaza a los intereses de nuestro país. Igualmente, cómo la diplomacia venezolana no ha sido capaz de completar acuerdos en toda el área caribeña, si son necesarios para el normal desarrollo de los intereses de Venezuela, fundamentalmente en un área vital para la geopolítica nacional.
Sería conveniente que la comisión encargada de delimitar, en base a los acuerdos previos firmados por el país, tenga como piedra angular la defensa de los derechos e intereses nacionales antes que estar haciendo lobby perenne que no beneficia de ninguna manera al país. Ya que lamentablemente, el Gobierno ofrece sin condiciones el petróleo como “garante” de las relaciones con los Estados Insulares, sin esclarecer sus intenciones con respecto a los límites donde pueda ejercer plenamente soberanía en el extremo oriental de sus fronteras marítimas en el Caribe.
Las visiones geográficas y estratégicas en el Mar Caribe marcan el comienzo de la complejidad de las relaciones entre Venezuela y sus vecinos insulares, es decir, la problemática del mar mide el avance de las relaciones entre los estados caribeños. El Caribe reúne una seria cantidad de intereses; es un espacio marítimo de tránsito de importancia mundial, cuestión que explica la presencia naval de las grandes potencias hegemónicas del mundo como una característica constante de la dinámica evolutiva de la región.
En función de ello, surge la visión marítima de Venezuela que ha tomado identidad y existen grandes objetivos de desarrollo marítimo, los cuáles demarcan las bases modernas de nuestra política exterior hacia el Caribe, los cuales podría mencionar:
* El carácter vital de ese espacio queda reflejado en que Venezuela lo utiliza para la transportación del 98% de sus exportaciones y el 95% de sus importaciones.
* La explotación de los hidrocarburos subyacentes en la Zona Económica Exclusiva, mediante la instalación de plataformas de perforación y distribución de productos derivados
* El desarrollo de una infraestructura de servicios para el turismo, en adecuado aprovechamiento de los distintos escenarios marítimos.
* La instalación de sistemas científicos de observación, estudio, vigilancia y control de los ecosistemas costeros y marítimos.
* La defensa y seguridad mediante el fortalecimiento de la flota para reforzar el control de la navegación y de los recursos.
Los países del Caribe Oriental que no reconocen la categoría de “Isla” de la Isla de Aves, justifican su reclamo en el Parágrafo Tercero del Artículo 121 de la Convención del Derecho del Mar de 1982 y en el cual se dice:
“ARTÍCULO 121.- Régimen de las Islas: 1) Una isla es una extensión natural de tierra, rodeada de agua, que se encuentra sobre el nivel de ésta en pleamar. 2) Salvo lo dispuesto en el parágrafo 3, el mar territorial, la zona contigua, la zona económica exclusiva y la plataforma continental de una isla serán determinados de conformidad con las disposiciones de esta convención aplicables a otras extensiones terrestres. 3) Las rocas no aptas para mantener habitación humana o vida económica propia no tendrán zona económica exclusiva ni plataforma continental.”
La Isla de Aves es, a juicio de la Convención del Derecho del Mar y según su terminología, una “roca”, así que Isla de Aves debería ser conocida como “Roca de Aves”, con lo cual Venezuela dejaría de poseer una zona económica exclusiva de más de 75.000 kilómetros cuadrados, siempre y cuando hubiere firmado y ratificado la Convención. Por ese primer y especial aspecto, Venezuela no pudo aceptar el texto de la Convención de lleno, y aunque podía firmar y ratificar la Convención del Derecho del Mar de 1982 en su totalidad haciendo alusión a una reserva con respecto a ese Artículo y a los otros que cuestión, la reunión de Montego Bay inclinó a la mayoría de los países presentes para la ocasión en inscribir un Artículo en el texto final que, sería una completa novedad en la Teoría del Derecho de los Tratados, se refiere al Artículo 309, y el cual dice:
“ARTÍCULO 309.- Reservas y Excepciones: No se podrán formular reservas ni excepciones a esta Convención, salvo las expresamente autorizadas por otros artículos de la Convención”.
Venezuela y la mayoría de los países del Caribe Oriental siempre han tenido una relación comercial pro-activa en el plano comercial y cultural a lo largo de los últimos dos siglos, pero no ha sido lo mismo en lo que respecta a las relaciones de Venezuela con Dominica, Granada, Santa Lucía y San Vicente, Sn. Kitts-Nevis Monserrat ya que existe una reclamación territorial aún sin resolver y, la cual, trata sobre la posición de estos Estados insulares quienes niegan a la Isla de Aves (Venezuela) cómo creador de jurisdicción marítima. Venezuela ha puesto de manifiesto su opinión de que Isla de Aves es un islote perteneciente a su territorio y por tanto creador de jurisdicción marítima, en cambio, Dominica, Granada, Santa Lucía y San Vicente, contradicen tal tesis al afirmar que Isla de Aves no es una isla y por defecto no crea jurisdicción según lo estipula el Artículo 121 de la Convención del Derecho del Mar de 1982. Venezuela ha intentado aclarar este escenario a través de sus relaciones diplomáticas, no obstante la situación se ha vuelto un poco más compleja y dificultosa debido a que los éstos Estados insulares, después de la creación de la OECO ( Organización de Estados del Caribe Oriental), han preferido discutir la situación de Isla de Aves como grupo asociado y no independientemente.
Dado que las posición de los Estados insulares del Caribe Oriental se ha desarrollado más, ahora, que proceden como grupo a través de la OECO, será recomendable que Venezuela mantenga una política exterior de Estado con respecto al respeto de su soberanía sobre Isla de Aves, sin embargo, esto no querrá decir que el país debe alejarse de las mesas de negociaciones con estos países ya que esto deterioraría la dinámica armónica que siempre ha mantenido en la región.
Venezuela deberá recrear modernos planteamientos a la hora de ejercer los contactos diplomáticos con CARICOM ( Comunidad del Caribe), ya que la postura de esta organización (la cual favorece a los miembros de la OECO y su reclamo), exige de nuestro país un cambio de percepción en la manera de cómo se han comprendido las relaciones diplomáticas en la región. Así, será justo un mayor énfasis político en el caribe, es decir, que no sería del todo inapropiado que Venezuela profundizara sus lazos aún más con cada uno de los países que integran CARICOM, pero no en sentido multilateral, sino en sentido bilateral, en cuanto al acercamiento cooperativo con los Estados cuya posición geográfica no compartirían interés por el tema de Isla de Aves, pues así será posible debilitar la oposición dentro de el CARICOM en defecto de Venezuela.
La opinión del gobierno nacional sobre esta materia no es conocida. Pero no sería ni malo que se nos informara qué está pasando, porque, a pesar de Petrocaribe, los países del CARICOM, incluyendo Guyana y Trinidad-Tobago, están unidos en el reclamo sobre Isla de Aves y si no nos preocupamos allí puede nacer otro de esos debates limítrofes que se estiran durante siglos, con Venezuela en el rol del malo de la película.
Fuentes Bibliográficas
MARQUEZ, Pompeyo. Los misterios de la frontera marítima y sur oriental.
TORREALBA, Alfredo. Areas de interés de Venezuela en el Caribe.
Ana María Rodríguez Alfaro
C.I. 14767245
Claudia Pérez
C.I 16.901.330
La fachada marítima de Venezuela, cuenta con 2.256 Km. de costa caribeña, que se proyecta hacia el Mar Caribe para encontrarse con un abanico de Estados Insulares. Tal hecho, le plantea la imperiosa necesidad a nuestro país de establecer una delimitación de las áreas marinas y submarinas con cada una de estas islas, a fin de fijar los límites dentro de los cuales las partes podrán ejercer sus respectivas soberanías y llevar a cabo sus más diversas y esenciales actividades de manera libre, particularmente las relativas al comercio internacional. En este sentido, vale la pena mencionar que en la actualidad, nuestro país ha logrado establecer su delimitación en el Caribe con: Estados Unidos de Norteamérica (1978), las Antillas Neerlandesas (1978), Francia (1980) y Trinidad y Tobago (1990).
Ahora bien, aun cuando Venezuela ha adelantado mucho al lograr las cuatro delimitaciones antes mencionadas, lo cierto es que, aun le queda pendiente realizar dicha tarea con las islas: Dominica, Granada, San Vicente y Santa Lucia. Para ello, considero que en principio, nuestro país debe lograr la delimitación con dichos Estados insulares mediante el uso de la negociación, mecanismo por de mas efectivo, entre los medios pacíficos de solución en este tipo de controversias, tomando a su vez como referencia, las exitosas experiencias del pasado, en cuanto a nuestras demarcaciones en el Caribe se refiere.
De esta manera, en atención a las exigencias venezolanas, las cuales apoyo enteramente, es de gran relevancia crear una agenda de negociaciones entre las partes, de carácter bilateral y confidencial, en las cuales se definirán la naturaleza jurídica de las áreas a delimitar así como los métodos de delimitación que garanticen la justicia y equidad en cuanto a la preservación de los derechos e intereses se refieren. Por ejemplo en el caso de Venezuela, Jiménez y Marazzo, señalan en su ensayo, que las consideraciones e intereses de nuestro país en cuanto a la delimitación de las áreas marinas y submarinas en el Caribe “deben ser acordes con la costa venezolana y con el peso continental e insular de Venezuela”.
Por otra parte, debe establecerse una Comisión Técnica de demarcación especializada en cada caso (la delimitación de las áreas marinas y submarinas de Venezuela con: Dominica, San Vicente, Santa Lucia y Granada). Tal Comisión deberá estar conformada por un equipo multidisciplinario, cuya tarea será investigar y proponer los puntos de base en donde se iniciará la respectiva delimitación y además, proponer de acuerdo a lo investigado y a los intereses nacionales, cual sería el método más idóneo para realizar la delimitación.
Así mismo, Venezuela debe negociar bilateralmente sus delimitaciones, con cada país en particular y no en bloque, de manera de garantizar la consecución de sus intereses nacionales en el área, los cuales básicamente se centran en el establecimiento de una Zona Económica Exclusiva y una Plataforma Continental acorde con el peso continental e insular de Venezuela. Tal postura debe ser la imperante, puesto que las conversaciones que en esta materia establezcamos, deberían estar sujetas a las particularidades históricas, culturales, geomorfológicos, etc de cada una de las partes. Es por ello, que en un escenario contrario ( la negociación de nuestro país con estas Islas en bloque), se podría sufrir el riesgo de grandes inflexiones a nuestros intereses.
En efecto, en supuesto negado que Venezuela estableciese a la Isla de Aves como punto de base para iniciar la demarcación de nuestros límites marítimos y submarinos con, Santa Lucia y San Vicente en su conjunto, sus costas superarían en kilometraje a las costas de la Isla de Aves, lo cual favorecía a estas últimas, al momento de establecer la Zona Económica Exclusiva, tal y como ocurrió en el caso de la delimitación con las Islas francesas de Guadalupe y Martinica en 1990.
Asimismo, considero que a los efectos de garantizar la reafirmación de nuestra soberanía en el Caribe nuestros puntos de partida para iniciar la delimitación por ejemplo con San Vicente y Santa Lucia debe ser la Isla de Aves y, con Granada debe ser Los Testigos. En este sentido, los representantes venezolanos deben lograr en base a argumentos firmes que cada una de las partes acepten los puntos de partida sugeridos, los cuales podrán ser claramente definidos y presentados por los miembros del grupo de expertos, que conformarán el equipo de la Comisión Técnica de Demarcación, para la delimitación de las áreas marinas y submarinas de Venezuela con cada uno de los mencionados Estados insulares.
Lo cierto es que nuestros representantes en las negociaciones no deben descansar en la tarea de lograr que estas islas (Dominica, San Vicente y Santa Lucia) reconozcan a nuestra Isla de Aves, como el punto de partida para cualquier delimitación de las áreas marinas y submarinas con ellas, y en tal sentido, podrían tomar en cuenta los siguientes argumentos:
o Primeramente, a fin de que se acepte por las partes, los derechos que tiene Isla de Aves de ser considerada como Isla y por ende reconocerle su capacidad de producir una Zona Económica Exclusiva y Plataforma Continental, es necesario insistir en las conversaciones con las demás partes, que esta isla venezolana cumple con todos los requisitos establecidos en el artículo 121 del Convenio de la III Conferencia de las Naciones Unidas sobre Derecho del Mar de 1982, el cual señala que: “ 1)- Una Isla es una extensión natural de tierra, rodeada de agua, que se encuentra sobre el nivel de ésta en pleamar y 3)- Las rocas no aptas para mantener habitación humana o vida económica propia no tendrán zona económica exclusiva ni plataforma continental”.
o En segundo lugar, debe hacerse referencia al hecho de que tanto Estados Unidos como Holanda han reconocido que Isla de Aves cumple con las condiciones establecidas en el artículo mencionado con anterioridad, y por ende tiene derecho tanto a su Zona Económica Exclusiva como a su plataforma Continental, ya que tiene capacidad económica al poseer y tener la posibilidad de explotar y comerciar con el guano (excremento de las aves considerado importante por ser utilizable como abono o como una fuente energética). Isla de Aves tiene habitabilidad humana, se encuentra ocupada por un contingente de la Armada encargado de velar por nuestra soberanía en el área. Aunado a ello, en el año de 1972 el Ejecutivos emitió un Decreto donde es declarada Isla de Aves como un Refugio de la Fauna Silvestre orientado a preservar el ecosistema del área.
Para finalizar, la República Bolivariana de Venezuela podría utilizar como instrumento para iniciar las conversaciones para la delimitación de las áreas ya mencionadas con San Vicente, Santa Lucia, Dominica y Granada, la cooperación o la firma de acuerdos energéticos u otros, como lo hizo en la delimitación con Trinidad y Tobago. Para este caso, se tomo como punto de partida los aspectos en que coincidíamos con la otra parte, llegando finalmente a un acuerdo mediante un proceso de conciliación de intereses, el cual por lo demás es el que debe prevalecer en las negociaciones, de manera de que los objetivos alcanzados por las partes involucradas sean en términos justos y equitativos.
Referencias:
MORALES PAUL, Isidro.(1983). “La Delimitación de Áreas Marinas y Submarinas al Norte de Venezuela”. Caracas: Academia de Ciencias Políticas y Sociales.
JIMENEZ RODRIGUEZ, Armando y MARRAZO FERMOSO, Mariloly. (2000). Política Exterior de Venezuela en Materia de Delimitación de Áreas Marinas y Submarinas frente a la República de Trinidad y Tobago.
Convención de la III Conferencia de las Naciones Unidas sobre Derecho del Mar, Montegobay, Jamaica 1982. Disponible en: http://www.cinu.org.mx/temas/Derint/convemar_es.pdf. [Consulta: 2008 Diciembre 13].
Andreina Vieira Toro
C.I. 18.357.569
Venezuela es un país con una posición estratégica en America del sur. Su territorio marítimo caribeño es un aérea de gran significación, pues en ella, el Estado desarrolla diversas actividades económicas, como lo son la pesca y la extracción de recursos naturales diversos, indispensables para la subsistencia humana Así mismo, la soberanía de nuestro país se extiende no solo al territorio continental e insular sino también, al mar territorial que abarca una extensa región marítima que limita además de Guyana y Colombia, con varios naciones y estados insulares en el mar caribe. De allí que las delimitaciones de sus áreas marinas y submarinas sean de vital importancia para las relaciones políticas territoriales con los países cercanos.
La frontera caribeña venezolana, representa una fachada de 2.718 Kilómetros, que vista desde un punto de vista geopolítico, confiere a nuestra nación, un carácter geoestratégico, que posibilita el dominio y la profundización de las relaciones políticas, sociales y económicas con nuestros vecinos del Caribe. No sabemos si tal posición privilegiada, se haya convertido en obstáculo para que algunos estados insulares tales como Dominica, Grenada, Santa Lucía y otras islas del Caribe, aún no concreten, acuerdos de delimitación fructíferos con Venezuela. Sin embargo, este último, ha establecido convenios con Holanda (Aruba, Curacao y Bonaire), Estados Unidos, República Dominicana, Francia (Guadalupe, Martinica) y Trinidad y Tobago, los cuales han sido aceptables para ambas partes involucradas.
Tal experiencia positiva en dichas negociaciones y tratados, son útiles como referencia, a la hora de fundamentar proyectos de delimitación fronteriza con países como San Vicent, San Kitts y Nevis, Montserrat, Grenada, Dominica y Santa Lucia, naciones que como lo señalábamos anteriormente, no han concretado un acuerdo limítrofe. En este sentido, para sustentar nuestro análisis, debemos hacer algunas consideraciones previas.
En primer lugar, hay que destacar, que el frente costero de Venezuela tiene una proyección al Mar Caribe que se caracteriza por ser semicerrado por un conjunto de Estados insulares, caracterizados por la diversidad y heterogeneidad lingüística y cultural. Así mismo, algunos de dichos Estados tienen pleno ejercicio de soberanía mientras que para otros, el ejercicio de ella es limitado. En tal sentido, dichas particularidades además de las geográficas, deben ser tomadas en cuenta a la hora de realizar las negociaciones correspondientes a la delimitación de sus fronteras marítimas.
Por otra parte, de llegarse a futuros acuerdos, ellos deben ser razonables, en la medida que se rijan por principios equitativos, en otras palabras, debe considerarse el grado de proporcionalidad entre la extensión de las fachadas marítimas pertenecientes a cada Estado. Es decir, en el supuesto que los frentes costeros de las islas anteriormente mencionadas, sean mayores al de las costas venezolanas, estas saldrán favorecidos en el establecimiento de la línea limítrofe entre las Zonas Económicas Exclusivas. Tal situación debe evitarse, teniendo como principio, que debe respetarse la geografía particular de cada Estado involucrado en particular.
Los anteriores planteamientos sirven como punto de partida para señalar las líneas de acción, que debería adoptar Venezuela en la delimitación con la isla de Granada, Estado insular, que hemos escogido para exponer las siguientes recomendaciones:
• En primer lugar y debe darse por supuesto, conformar una comisión de negociación para llevar a cabo las conversaciones entre las partes involucradas.
• Los planteamientos que recojan dichas conversaciones, deberán tener carácter confidencial. Ello permitirá que ambas partes, puedan expresar libremente las aspiraciones de los intereses nacionales que ellas representan con respecto al asunto en discusión.
• Para poder lograr un acuerdo equitativo entre ambas partes se deberán realizar una serie de concesiones considerando, la postura de Granada en cuanto a la realización de la delimitación a través del establecimiento de una línea media siempre y cuando el punto base de dicha delimitación sea a partir de la isla de los Testigos.
• Con base a los anteriores planteamientos, Venezuela garantizará su soberanía en las áreas marinas entre la isla de los Testigos y la fachada costera. A su vez Venezuela puede ofrecer a la isla de Granada, cooperar en materia de exploración de hidrocarburos en su territorio. Tal cooperación podría conllevar en un futuro, a prestar asistencia técnica para la explotación petrolera, en el caso de encontrarse hidrocarburos en dicha zona. Para la presente propuesta, se ha tomado como referencia el hecho de que desde el año 1996, Granada en busca de alternativas para mejorar su economía y ante la posible posesión de hidrocarburos (petróleo y gas) en su costa afuera, ha solicitado insistentemente la cooperación de Venezuela para la fase de exploración, sin embargo, hasta ahora, no se ha dado ninguna respuesta por parte de nuestro país.
• Así mismo, uno de los puntos fundamentales a concretar entre las partes deberá ser en relación al régimen de navegación, por el cual se permita el libre tránsito de las naves y aeronaves tanto de Venezuela como de Granada a través del área delimitada, comprometiéndose ambas partes a llevar a cabo sus actividades en el área sin afectar el medio marítimo. Por supuesto ello implicaría la adopción de medidas y normativas orientadas a tal fin.
Las anteriores propuestas a nuestro modo de ver, podrían dar término a las posiciones antagónicas que hasta el día de hoy han caracterizado los intentos de delimitación entre Venezuela y Granada. No olvidemos que esta última, ha insistido en lograr una línea media que no incluya el Archipiélago de Los Testigos. El Primer Ministro Mitchell en visita oficial a Venezuela (noviembre de 2000), ofreció Granada como sede para el comienzo de las conversaciones sobre ésta materia “Tentativamente, se acordó que las negociaciones relativas a la delimitación se inicien en la segunda quincena de enero de 2001.” No hay referencias de haberse realizado tal acuerdo. En todo caso, el entendimiento entre las partes, deberán quedar asentadas en un acuerdo bilateral que suscribirán a perpetuidad ambos Estados.
La búsqueda de negociaciones equitativas y bilaterales con Granada y otros Estados Insulares del Caribe pareciera han quedado estancadas. Para dirimir esta situación, no hay mas que tomar como punto de referencia, los tratados de delimitación que ya previamente han sido firmados con Estados Unidos de América, Reino de los Países Bajos, República Dominicana, República Francesa y Trinidad-Tobago, mediante los cuales se ha logrado delimitar un 70% de las fronteras marítimas venezolanas.
Referencias:
o Feijoo Colomine Rincones.(1999, Mayo-Octubre). Importancia Geoestratégica de las Dependencias Federales e Isla de Aves En: Aldea Mundo: Revista sobre Fronteras e Integración, Año 5, Nº 9. Universidad de los Andes, Mérida, Venezuela.
o JIMENEZ RODRIGUEZ, Armando y MARRAZO FERMOSO, Mariloly. (2000). Política Exterior de Venezuela en Materia de Delimitación de Áreas Marinas y Submarinas frente a la República de Trinidad y Tobago.
o Minuta de la Visita del Primer Ministro de Granada. (2000, Noviembre 7). Disponible en: http://www.analitica.com/va/internacionales/politica_exterior/4846359.asp. [Consulta: 2008, Diciembre 13].
o MORALES PAUL, Isidro.(1983). “La Delimitación de Áreas Marinas y Submarinas al Norte de Venezuela”. Caracas: Academia de Ciencias Políticas y Sociales.
o RAMIREZ POVEDA, Eddie. (2001, Julio 09). Isla de Aves: un territorio que no admite discusión. Disponible en: http://www.talcualdigital.com/ediciones/2001/07/09/p20s1.htm. [Consulta: 2008, Diciembre 14].
o SALGUEIRO, Adolfo. (2008, Junio 21). La Segunda Reclamación ante Guyana Disponible en: http://www.eluniversal.com/2008/06/21/opi_35209_art_la-segunda-reclamaci_904141.shtml. [Consulta: 2008, Diciembre 12].
o TORREALBA, Alfredo. (2005, Diciembre 05). Areas de interés de Venezuela en el Caribe: el conflicto de Isla de Aves y Archipiélago Los Testigos y la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar de 1982. Disponible en: http://74.125.113.132/search?q=cache:te4wgUtPb10J:www.debatecultural.net/Nacionales/AlfredoTorrealba5.htm+delimitacion+de+aguas+marinas+venezuela+grenada&hl=es&ct=clnk&cd=5&gl=ve. [Consulta: 2008, Diciembre 14].
A pesar de que existen en Venezuela tantos especialistas en materia de derecho del mar y que este país es la fachada costera más grande en todo el Caribe. No es fácil llegar a una solución cuando estamos hablando de un Estado archipelágico conformado por varias islas y que su capacidad debería verse en la zona económica exclusiva, y Plataforma Continental.
Para algunos legisladores la delimitación con Venezuela debería ser una delimitación conjunta es decir, Caribe o islas del Caribe con Venezuela y no República Dominicana con Venezuela, Trinidad con Venezuela.. en fin, en el caso de Isla de aves “archipiélago de las aves” pertenece históricamente y Geográficamente a nuestra nación está en los mapas y además existen dos resoluciones a nivel extra judicial a manera de antecedentes jurídicos. Una con Holanda y otra con los Estados Unidos. Con Holanda ya que es colindante con la Isla de aves en los territorios de Saba y S. Eustaquio, las Antillas Neerlandesas (Araba, Curazao, Bonaire, Saba, S.Eustaquio) Saba y S. Eustaquio históricamente tuvieron Puerto de pesca en la isla de aves eso generó una reclamación hecha por Holanda en el año de 1854 sobre la cual ellos manifestaron posesión histórica por vía de laudo arbitral es que resolvemos las diferencia. Con un alegato geográfico y de uso que debiera favorecer a Venezuela el del Utis Possidetis uris. En segundo lugar encontramos la explotación de guano por parte de propietarios norteamericanos llegando Venezuela a acordar la concesión de licencias y el retiro de los norteamericanos sobre la base de la Soberanía Venezolana porqué la isla de aves tiene un papel importante a nivel estratégico ya que no poseemos fachada continental. Recordemos la isla de aves no es más que un promontorio saliente de 12 metros de largo sin capacidad de para ser habitado. Sin embargo en el 56 estaba el interés del guano pero hoy día los recursos económicos serán viables nosotros tenemos recursos petroleros, ellos viven del turismo. Sea como sea no debemos dejar perder lo que históricamente nos corresponde. La masa continental debería prevalecer sobre las islas a la hora de pensar resucitar este tema que muchos dan por muerto. Si Venezuela cree que la ponderación de la Masa Continental debería prevalecer sobre el de la masa insular como quedaría la negociación entre Venezuela y Colombia referente a los Monjes. Ya que la fachada continental en este caso es la Guajira colombiana y los Monjes una islita a lado. Bueno habría que ser consecuente con ese principio, Venezuela estaría dispuesto a ponderar favorablemente en esa zona la masa continental colombiana contra la fachada insular sin negar su capacidad plena. El continente debería para Venezuela generar mayor ingreso que una isla así no sea rentable. Debe ser aplicada la equidistancia para el logro de resultados acordes a nuestros ideales. Todas las delimitaciones en este contexto del Caribe han sido bilaterales que con cada una de las islas. Es muy negativo esto ya que resulta más conveniente negociar con todos lo que nos haga falta como por ejemplo la capacidad de navegación que pudiera negociarse con Araba, Curazao.. en fin, también Holanda puede otorgarle a Venezuela un papel beneficioso a nivel de capacidad de negociación en el caso de los Monjes que no solo delimita con Colombia sino con Republica Dominicana, Aruba.. El caso de las Antillas Neerlandesas es aún mas complejo puesto que tiene varias formulas de soluciones en un mismo acuerdo son dos zonas geográficas distintas. Dos resoluciones diferentes. Afortunadamente ni Aruba ni Curazao ni Bonaire pueden declararse Estado archipelagico. La historia de isla de aves no ha sido fácil tanto Inglaterra como Holanda la han reclamado para si EEUU la ocupó y explotó, Venezuela solo pidió reconocimiento de su capacidad plena en isla de aves lo grave es no solo desconocer la soberanía venezolana sobre isla de aves sino que la delimitación con Trinidad no es del conocimiento público. Comentado en un articulo de prensa de Don Pompeyo Márquez “ Brabados desconoce la delimitación con Trinidad quiere cerrar totalmente nuestra salida al Atlántico e incursiona en aguas venezolanas a lo que la Cancillería guarda silencio.”
Referencia bibliográfica. Isidro Morales Paúl. La Delimitación de Áreas Marinas y Submarinas al Norte de Venezuela.
Las delimitaciones de las áreas marinas y submarinas de Venezuela en el Caribe, se centra en la presencia de la Isla de Aves en el mar Caribe. El archipiélago de las aves históricamente ha sido parte del territorio venezolano, esto se justifica en el año 1854 cuando un grupo de norteamericanos de la compañía Lang & Delano (comerciantes de Boston) se dedicaron a la explotación ilegal de guano (excremento de aves marinas usado como fertilizantes) en la Isla de Aves. Durante algunos años se ejerció esta práctica y la pretensión por parte de EEUU de reclamar como suya esta isla, hasta que en 1859, Luis Sanoja, Secretario de las Relaciones Exteriores de Venezuela y Edward A. Turpin, Ministro Residente de EEUU, firmaron el acuerdo donde EEUU desistía de su reclamo de soberanía sobre la Isla de Aves, reconocida como soberanía venezolana heredera de las posesiones españolas.
En 1854 Holanda reclama los derechos de su país sobre la Isla de Aves. El gobernador de Curazao (Holandés) exigió la desocupación. Luego de algunos hechos que requirieron presencia diplomática, llegando incluso, una flota holandesa amenazante hasta La Guaira. Suceden algunas intervenciones internacionales y en 1865, cuando la Reina Isabel II de España, produce su decisión favorable a Venezuela sobre la soberanía de la Isla de Aves, aceptada por Holanda en 1866.
Ahora, jurídicamente hablando, existe un tratado de delimitacion que establece el reconocimiento de la Isla de Aves como parte de Venezuela, que es el tratado con Estados Unidos de América. La delimitación establecida en el año 1978 corresponde al espacio o área entre la isla de Puerto Rico y Santa Cruz con la formación de isla constituidas por el Archipiélago de Aves, La Orchila, Los Roques e Isla de Aves. El Tratado reconoce la totalidad de las áreas marítimas (Mar Territorial, Zona Económica, plataforma Continental), de todas las islas venezolanas involucradas.
El reclamo de los países caribeños sobre la integridad de la soberanía venezolana en la Isla de Aves se basa nada más y es la única base que tiene, que es la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, donde en su artículo 121 establece la condición sobre el régimen de las islas: ¨1) Una isla es una extensión natural de tierra, rodeada de agua, que se encuentra sobre el nivel de ésta en pleamar. 2) Salvo lo dispuesto en el parágrafo 3, el mar territorial, la zona contigua, la zona económica exclusiva y la plataforma continental de una isla serán determinados de conformidad con las disposiciones de esta convención aplicables a otras extensiones terrestres. 3) Las rocas no aptas para mantener habitación humana o vida económica propia no tendrán zona económica exclusiva ni plataforma continental.¨
Los países caribeños consideran que la isla de Aves no es una isla, es más bien una roca. Ya que esa isla no genera vida económica ni poder mantener habitación humana. Venezuela no forma parte de esta convención ya que por este mismo artículo Venezuela no pudo firmar la convención debida a que la convención no permite hacer reservas ni excepciones.
Sobre este tema los países caribeños atacan a Venezuela en un solo frente por lo tanto las líneas que debe seguir el gobierno venezolano son:
• Negociar con los países caribeños en forma bilateral, de esta manera Venezuela tendrá un lugar más posicionado dentro del proceso de negociación.
• Seguir con la política exterior sobre el respeto de la soberanía venezolana en la Isla de Aves. Si esta política no sigue, debilitara la posición venezolana.
• Seguir con la ocupación y control efectivo de la isla y en la zona económica exclusiva de más de 75.000km cuadrados.
• Seguir cooperando en otros ámbitos con los países caribeños como por ejemplo, el Petrocaribe. De esta manera se cambiaran las percepciones sobre el conflicto de interés entre Venezuela con el Caribe.
Referencias:
MORALES PAUL, Isidro.(1983). “La Delimitación de Áreas Marinas y Submarinas al Norte de Venezuela”. Caracas: Academia de Ciencias Políticas y Sociales.
TORREALBA, Alfredo. Áreas de interés de Venezuela en el Caribe: el conflicto de Isla de Aves y Archipiélago Los Testigos y la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar de 1982. [En Línea]. [Consulta: 15 de diciembre de 2008]. Disponible en: http://www.debatecultural.net/Nacionales/AlfredoTorrealba5.htm
COLLINS, John. David and Goliath Clash Over Tiny Islet. Venezuela wants to expand its maritime frontier and gain access to oil and fishing rights. [En Línea]. [Consulta: 15 de diciembre de 2008]. Disponible en: http://da-academy.org/avesisle.html
La Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, 1982.
Según el marco legal vigente, y sobre la base de la evolución histórico-jurídica de las Conferencias de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, el mapa que tiene hoy la República Bolivariana de Venezuela contempla no sólo el espacio geográfico, sino también los espacios limítrofes, zonas contiguas, mar territorial y zonas económicas exclusivas.
Todas ellas juegan un rol fundamental en el desarrollo integral de la nación, pero específicamente, el área de el Caribe constituye una prioridad de la política exterior venezolana, porque, los votos que representa el Caribe (14 en el marco del CARICOM) pueden significar un respaldo inmensamente importante y significativo en foros, convenciones, reuniones en las que se tomen dediciones y organismos internacionales que resulta relevante establecer por parte de Venezuela; y además las rutas marítimas de importación y exportación del país son vulnerables a las acciones que pudieran adelantar gobiernos adversarios que llegasen al poder en cualquiera de las islas, por lo que Venezuela debe promover relaciones con estos países para minimizar esa posibilidad.
Por otra parte, analizando el rol actual de la política exterior venezolana, considero que es determinante evaluar las acciones del actual Gobierno del Presidente Hugo Chávez en busca de aperturas, acuerdos a través de su política exterior de tal forma que ayude al país a salir de su depresión económica, inestabilidad, turbulencia que presenta, ahora que el mundo financiero global se estremece con una recesion económica que nos afecta interna y externamente.
Considerando así, la importancia que tiene el área del Caribe para Venezuela, las líneas próximas de acción en cuanto a nuestra política exterior, deberían enmarcarse en un ambiente de cooperación mutua, empleando así la complementariedad económica, el apoyo financiero para un desarrollo económico y social multilateral.
En este sentido, también es fundamental para la política exterior venezolana los procesos de integración en Latinoamérica y el Caribe, con miras a la constitución de un solo bloque regional que consolide la Unión Latinoamericana; ya el programa de gobierno actual tiene como eje central el fortalecimiento de la soberanía en pro de la integración multipolar.
Kimberly Ponce Acevedo
C.I: 17.868.643
Con respecto a las delimitaciones del caribe con Venezuela, tenemos que en ocasiones algunos estados caribeños no han aceptado la propiedad de Venezuela sobre algunas islas; como es el caso de Isla de Aves y del Archipiélago los Testigos; pues para ellos representa un interés primordial el despojar a Venezuela de dichos territorios, sin embargo tal cosa no es posible, pues Venezuela tiene reconocimiento pleno sobre las islas (basados en el principio del ituis posidetis juris y en los tratados internacionales firmados con los diferentes países que le dan un reconocimiento tácito de Venezuela sobre la isla, tal es el caso del tratado firmado con Estados Unidos de América sobre la delimitación establecida en el año 1978 con respecto al espacio entre la isla de Puerto Rico y Santa Cruz ante Isla de Aves, el archipiélago de las Aves, La Orchila y Los Roques, en donde se le reconoce a Venezuela el mar territorial, plataforma continental y la zona económica exclusiva, de todas las islas venezolanas involucradas.
Por otra parte, algunos Estados caribeños como es el caso de St. Kitts-Nevis, Dominica, Santa Lucía, San Vicente, Granada y Monserrat, han tratado de alegar que Isla de Aves no es una isla, sino una roca, pero Venezuela ha demostrado y sustentado ser Isla, así que ejercemos soberanía plena sobre la misma. Sin embargo, debemos de aprovechar los mecanismos de integración para no llegar a un conflicto y mantener relaciones armoniosas con los diferentes estados caribeños.
No obstante, es curioso evaluar que Dominica y San Vicente y Granadinas pertenecen al ALBA –quienes reclaman el territorio de Isla de Aves- a su vez, estos mismos miembros más St. Kitts-Nevis, son miembros de PETROCARIBE desde el año 2005. Por otra parte todos los países del caribe pertenecen al Banco De Desarrollo Del Caribe, así como otros miembros no regionales (que por su puesto no pueden optar a créditos), entonces me pregunto:
¿Qué líneas de acción debe tomar mi país ante esta situación?
Primeramente hay que establecer relaciones armoniosas con estos países y eso sólo se podrá lograr por medio de la negociación entre Venezuela y los países caribeños, tanto de forma bilateral como de forma multilateral, pues contamos con la ventaja de que al negociar de forma bilateral lograremos imponernos, sin embargo sabemos que mucho de estos territorios no querrán hacerlo de esta manera, por lo cual la única alternativa multilateral sería por medio de la vía de los mecanismos de integración, como lo son PETROCARIBE y la ALBA, evidentemente no en el CARICOM, pues Venezuela sólo es observador y el panorama quizá no sea el más positivo para Venezuela.
En el caso de la ALBA, se deberían crear programas de cooperación directa entre Venezuela, Dominica y San Vicente y Granadinas, así como también tratar de integrar a St. Kitts-Nevis a este mecanismo de unión basado en la complementariedad, pues este mecanismo es mucho más amplio y permite establecer relaciones más sociales entre los miembros. En cuanto a PETROCARIBE, continuar con las políticas de acción, pero hacerlas más efectivas con respecto a otros ámbitos.
En mi opinión la mayor parte de la negociación debe sustentarse en la ALBA.
De todos modos, el reconocimiento internacional de Isla de Aves y del Archipiélago Los Testigos lo tenemos, en el caso de este último tenemos ocupación por parte de venezolanos que viven en la zona, debido a la cercanía que tiene a la Isla de Margarita.
Otro punto importante es que tanto como Isla de Aves, como el Archipiélago los Testigos deben estar custodiados por la Armada Nacional de Venezuela, para así guardarnos las espaldas ante cualquier eventualidad de invasión, etc., pues recordemos que Isla de Aves es un punto geoestratégico de mera importancia para Venezuela.
Acosta T, Henmary R.
V- 18 143 172
Por otra parte, sería interesante estudiar el siguiente escenario: ¿qué sucedería con nuestros límites si eventualmente la Isla de Aves desapareciera (supuesto que no está alejado de la realidad), pues a lo largo de los siglos la Isla ha perdido territorio en consecuencia de los huracanes que la han afectado?
FELIZ NAVIDAD!!!
Gracias Carlos por el Blog, de verdad se evidenció tu esmero y dedicación.
El tema de la delimitación de las fronteras marítimas entre Venezuela y los Estados caribeños es de mucha complejidad, puesto que básicamente se basa en las diferentes interpretaciones que se hacen del concepto de ¨isla¨ dispuesto en el Parágrafo Tercero del Artículo 121 de la Convención del Derecho del Mar de 1982. El grado de complejidad en este ámbito se debe a que Venezuela goza de 2.718 Km. de costas marítimas continentales que se encuentran de frente con el Mar Caribe y todas sus Naciones. Es por esto que el tema debe ser tratado con mucha cautela.
En el pasado hemos logrado negociaciones exitosas con respecto a este tema con países de gran peso mundial, como lo son Estados Unidos, Francia, Holanda e Inglaterra, pero no se ha logrado resolver las controversias limítrofes con países del Caribe Oriental como Dominica, Granada, Santa Lucía, San Vicente, San Kitts y Nevis y la isla de Montserrat. Estos países no reconocen a la Isla de Aves como una Isla, la reconocen como una Roca, y se basan en el numeral 3 del Artículo 121 de La Convención del Derecho del Mar de 1982 para argumentar que dicha Roca no genera derecho a Venezuela para reclamar una Zona Económica Exclusiva ni una Plataforma Continental.
Podríamos decir que la controversia se encuentra en un punto álgido, puesto que Venezuela al no haber firmado por completo dicha Convención en 1982 no se obliga a declarar a la Isla de Aves como una Roca, pero por otra parte tenemos que la OECO (Organización de Estados del Caribe Oriental) ha decidido que la situación se discuta de forma multilateral y no bilateral (como sería más provechoso para Venezuela).
Venezuela logró delimitar áreas marinas y submarinas y sus fronteras con otros países de gran importancia en Caribe; como cuando en mayo de 1978 se suscribió un tratado de delimitación de fronteras marítimas con los Estados Unidos, la línea limítrofe discutida determinó la unión de 22 puntos por medio de líneas y abarcó un extensión de 298,6 millas náuticas. El Tratado establece la obligación de ambos gobiernos de no reclamar ni ejercer jurisdicción al otro lado de la línea limítrofe, y en dado caso de que surja una controversia, la misma se resolverá de manera directa entre ambos gobiernos de manera estrictamente bilateral.
En cuanto a los antecedentes en éste tema con los Países Bajos, tenemos que en 1978 el Embajador de Holanda en Venezuela presenta a la Cancillería Venezolana un documento que expresaba las ganas de iniciar las negociaciones para delimitar las áreas marinas y submarinas (que entre ambas naciones existen muchas). En la delimitación de dichas áreas se realizó sin ningún problema y se aplicaron principios equitativos de delimitación.
Cabe destacar que la Isla de Aves ha sido de propiedad venezolana desde hace más de un siglo y que países como Holanda, los Estados Unidos, Francia e Inglaterra han reconocido la soberanía de nuestro Estado sobre este territorio tan controversial, es por esto que resulta difícil analizar el por qué no se ha logrado llegar a ningún lado con estas naciones caribeñas.
Venezuela puede sacar provecho para la evolución a su favor de esta controversia si se dedica a negociar con estos países caribeños de forma bilateral, y pienso que una de estas maneras puede ser por medio de Petrocaribe y otras formas de cooperación.
Alexis Irausquin
C.I 17.023.902
Feliz Navidad y Próspero año nuevo para todos...!!!!
Durante más de un siglo y medio, Venezuela ha estado inmersa en controversias con diversos países por la soberanía de Isla de Aves, durante la segunda mitad del siglo XIX, aproximadamente 1850 y 1860, tanto Estados Unidos de América como el Reino de los Países Bajos reclamaron su soberanía sobre dicha Isla, sin embargo, con posteriores acuerdos entre los países en cuestión y Venezuela, los primeros abandonan sus reclamaciones sobre la Isla. La importancia de esta Isla para Venezuela, reside en que la misma representa un bastión político-territorial dado que las delimitaciones de nuestras aéreas marinas y submarinas en el Caribe giran en torno a esta Isla, ya que permite que nuestra soberanía se extienda desde nuestras costas hasta prácticamente el centro del mar Caribe.
Venezuela, al proyectarse hacia el Mar Caribe en el norte, se encuentra con un conjunto de Estados Insulares que juntos llegan a conformar una suerte de un semi-circulo en donde es necesario establecer las delimitaciones de aéreas marinas y submarinas de cada uno de estos con Venezuela, recordemos que en el pasado, gracias a la vía de la negociación, hemos logrado establecer nuestros límites con Estados Unidos y las Antillas Neerlandesas en el año 1978, con Francia en 1980 y finalmente con Trinidad y Tobago en 1990, sin embargo, aun queda establecer la delimitación con las islas de Dominica, San Vicente, Santa Lucia y Granada. Ante esta diatriba por establecer los límites, dichas Islas establecen que, basándose en la III Convención sobre el Derecho del Mar, celebrada en Montego Bay, en el año 1982, y la cual no ha sido aceptada por Venezuela, la Isla de Aves no debe ser catalogada como una “Isla” sino una “roca”, esto apoyándose en lo señalado en el Articulo 121 de dicha convención, referente al régimen de Islas, el cual cito a continuación: “1) Una isla es una extensión natural de tierra, rodeada de agua, que se encuentra sobre el nivel de ésta en pleamar. 2) Salvo lo dispuesto en el parágrafo 3, el mar territorial, la zona contigua, la zona económica exclusiva y la plataforma continental de una isla serán determinados de conformidad con las disposiciones de esta convención aplicables a otras extensiones terrestres. 3) Las rocas no aptas para mantener habitación humana o vida económica propia no tendrán zona económica exclusiva ni plataforma continental.” Ante esta definición, estos Estados argumentan que “isla de Aves” ni cumple con la condición de habitabilidad humana ni con la condición de generar actividad económica, por lo que Venezuela argumenta, desde la primera mitad de la década de los 70, especificamente durante la presidencia de Rafael Caldera, mediante un Decreto que Isla de Aves se convertiría en un reservorio natural para preservar el equilibrio del ecosistema de la región.
Finalmente, y dado que todos estos países utilizan el mismo argumento sobre la ausencia de condiciones del territorio en cuestión para poder ser catalogado de “Isla” según la ya mencionada Convención sobre Derecho el Mar, la respuesta de Venezuela para establecer las delimitaciones que resulten beneficiosas para ambos, sin menoscabo de los intereses de las partes, debería ser, luego del establecimiento de una Comisión para llevar a cabo las delimitaciones, la defensa de la condición de Isla de Isla de Aves, basándonos en el reconocimiento que ya varios países nos han concedido sobre la condición de la misma, esto según el Tratado con Estados Unidos del año 1978, lo cual nos alienta a no abandonar esta estrategia que ha sido parte de nuestra política exterior durante las ultima décadas, en tercer lugar, el establecimiento de negociaciones de carácter bilateral, dialogando con las partes de manera individual para así poder atender a las exigencias de cada una, esto podría ser logrado mediante la estrategia de alianza energética que ha desarrollado el actual gobierno venezolano, denominada Petrocaribe, que si bien hasta ahora no ha sido tan beneficioso para nosotros como lo ha sido para los demás países miembros, no significa que no pueda llegar a serlo, ya que se puede llegar a utilizar como mecanismo de negociación para establecer las delimitaciones.
Herminia Fonseca Campagnuolo.
C.I 17.907.474
Feliz Navidad…..
Bibliografía consultada:
• MORALES PAUL, Isidro.(1983). “La Delimitación de Áreas Marinas y Submarinas al Norte de Venezuela”. Caracas: Academia de Ciencias Políticas y Sociales.
• Convención de Naciones Unidas Sobre el Derecho Del Mar. 1982.
La delimitación de las áreas marinas y submarinas para nuestro país en el frente oriental del área caribeña debe ser un objetivo de primer orden en la política exterior venezolana; el reconocimiento por parte de los países limítrofes de las áreas marinas y submarinas donde el Estado pueda ejercer soberanía es necesaria para el desarrollo del país, y más si se trata de un área como el Caribe, vital para la vida económica de Venezuela.
La demarcación que ha realizado el Estado venezolano en los últimos treinta años con países fronterizos en el Caribe, como los Estados Unidos de América y Países Bajos en 1978 y Francia en 1980, reconocen el carácter de Isla al territorio emergido mas septentrional de Venezuela, la Isla de Aves, a mas de 500 kilómetros al Norte de la Isla de Margarita, regido por lo ratificado por Venezuela en la Convención de Ginebra sobre Mar Territorial y Zona Contigua de 1958, concibiendo a una isla como toda extensión natural de tierra que sobresale en plenamar, ciertamente Las Aves emerge por tres metros sobre el nivel marino con 580 y 150 metros de longitud.
En el Tratado de Delimitación entre la República de Venezuela y el Reino de los Países Bajos de 1978, se adopto una línea limítrofe entre las Islas de Aves, Saba y San Eustaquio donde se consolida el control de Venezuela sobre Isla de Aves y sobre las áreas marítimas que la circundan, reconociéndose una vez mas el carácter de Isla y sus derechos a proyectar zona económica y plataforma continental en la zona.
En el caso de delimitación con los Estados Unidos de América en el mismo año, también es reconocida la calidad de Isla de las Aves por la delimitación marina y submarina con las islas de Puerto Rico e Islas Vírgenes, otorgándole a Venezuela zona económica exclusiva y plataforma continental compartida con los Estados Unidos.
Dos años más tarde, se negociaron los límites con la República Francesa (1980), estableciendo las líneas limítrofes de las zonas económicas exclusivas de ambos países, entre la Isla de Aves y las dependencias francesas de ultramar, Guadalupe y Martinica, enfrentadas en dirección Este-Oeste, tratándose a las Aves como una Isla.
La característica de espacio “cerrado” del mar Caribe, única salida marítima de Venezuela para el traslado de las mercancías de actividades de exportación e importación hacia el Atlántico, hace que la delimitación de espacios marinos y submarinos sean llevados a cavo de manera definitiva con aquellos Estados con los que no se ha logrado Tratados de Delimitación de espacios marítimos, como: Dominica, Granada, Santa Lucía y San Vicente, San. Kitts-Nevis y Monserrat.
Mantener la posición histórica de Venezuela del carácter de isla de la Isla de Aves, reconocida así por los Estados Unidos, Francia y Países Bajos, figuras de peso en materia del Derecho del Mar y actividades marítimas, debe ser un instrumento a defender por las comisiones encargadas en delimitar los espacios marinos con los países que aún no poseen acuerdos en esta materia con Venezuela. Están en juego más de 130 mil kilómetros cuadrados de zona económica exclusiva para nuestro país, que de no ser defendidas por vías legales y diplomáticas, serian parte de las pérdidas históricas de territorio que ha tenido Venezuela como consecuencia de errores en el manejo de las discusiones y negociaciones.
La delimitación de espacios marinos y submarinos por Venezuela y las seis entidades jurídicas, con las cuales se limita en el extremo oriental del Caribe, debe regirse por la metodología aplicada en las negociaciones ya realizadas en la misma área (Estados Unidos, República Dominicana, Países Bajos Francia, Trinidad y Tobago): la negociación directa, no por medio de lo planteado por la Organización de Estados del Caribe Oriental, de una negociación en bloques con nuestro país, ya que en asuntos territoriales se debe delimitar las fronteras de manera bilateral con cada Estado fronterizo y mas aun con aquellos que rechazando principios jurídicos y acuerdos previos, postergan un asunto primordial para cualquier Estado soberano, el conocer hasta donde llega su territorio.
Si bien nuestro país ha mejorado las relaciones en los últimos años con los Estados miembros del CARICOM, también, muchos de los integrantes de éste, lo son de la Organización de Estados del Caribe Oriental, quienes en reiterados comunicados oficiales se refieren a la Isla de Aves como una roca y se niegan a reconocer los derechos en zona económica exclusiva y plataforma continental que tiene por ser una isla, llamando a Venezuela a suspender cualquier actividad que ha desarrollado nuestro país en este territorio, como bautizos, matrimonios e investigaciones científicas, actividades totalmente legitimas y amparadas constitucionalmente para Venezuela.
Las mas de 300 millas náuticas que aun no se han definido entre Venezuela y un grupo de Estados Caribeños deben ser manejadas como un interés nacional, sin interponer beneficios económicos y políticos que puedan beneficiar a una porción de la sociedad venezolana en un momento determinado y que indirectamente reflejan una renuncia a los derechos que históricamente le pertenecen a Venezuela en este espacio marítimo. Renunciar a lo aceptado en el pasado por influyentes Estados sobre las características de Las Aves y doblegar en los derechos que se poseen sobre Los Testigos, seria ceder espacios soberanos; la no ratificación por parte de nuestro país de la III Convención sobre Derechos del Mar de 1982 y la actuación de espíritu de negociación que ha mantenido a lo largo del siglo XX Venezuela deben ser puestas sobre la mesa para establecer los limites marinos y submarinos en el Caribe oriental.
José G Villegas A.
C.I: 18.357.860
Omar Ramos
C.I: 8.644.625
Sugerencias acerca de la política a seguir por Venezuela con las Islas del Caribe, con las cuales todavía nuestro país no ha concertado sus delimitaciones de áreas marinas y submarinas
1. Debido a que las islas del Caribe Oriental no reconocen aún el estatus de isla de “Isla de Aves”, Venezuela debe seguir una estrategia dilatoria a la espera de mejores condiciones para negociar sus delimitaciones con las referidas islas.
2. Venezuela debe evitar en todo momento cualquier situación conflictiva con las mencionadas islas, dado que las mismas pertenecen al Caricom, y cualquier conflicto con alguna de ellas traería como consecuencia problemas con toda la Comunidad de Estados Insulares del Caribe pertenecientes a este organismo multilateral (Caricom), cuyos miembros persiguen una política exterior común.
3. Nuestro país debe establecer Pactos de Cooperación con los Estados Insulares del Caribe, y de manera especial con aquellos con los que todavía no ha solucionado su situación de delimitación; de manera de buscar un acercamiento con esas islas, verbigracia el pacto de cooperación que mantenemos con Granada, a la cual Venezuela suministra petróleo y compra su producción de nuez moscada, según afirma el profesor Argenis Ferre, “en casi su totalidad”. Con esto buscaríamos crear condiciones que sean favorables tanto para ellos como para nosotros, con miras al logro de arreglos limítrofes sin trauma alguno.
El Derecho del Mar, considerada una rama del Derecho Internacional Público, surge a principios del siglo XVII para reglamentar competencias entre las potencias europeas y en función de los nuevos espacios geopolíticos coloniales, para ser aplicado en el angosto y apretado espacio europeo. El enfoque principal para descubrir el Derecho del Mar que, a partir de 1982 ha entrado en una nueva etapa compleja marcada por la firma en Montego Bay, Jamaica, de la voluminosa Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, parte de los fundamentos económicos que hicieron a los Estados sentir la necesidad de crear la norma jurídica correspondiente.
Ya antes de terminar las negociaciones sobre el nuevo Derecho del Mar, se expresaron temores según los cuales la ampliación del mar territorial con fines de soberanía nacional a 12 millas náuticas, podría provocar ciertos conflictos en el Caribe. Así fue que en 1982 Venezuela no firmó la Convención de Las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar. Sucedió que el representante de Venezuela puso de manifiesto su inconformidad con el ordenamiento jurídico que se presentó y concluyó por no firmar, no sin antes expresar críticas a la nueva normativa (“un acuerdo global” en cuanto al tema del mar), esto llevó a profundizar cierto resquebrajamiento entre las relaciones internacionales de Venezuela con algunos países caribeños vecinos, tales como Saint Kitts-Nevis, Dominica, Santa Lucía, San Vicente, Granada y Monserrat, quienes tienen una reclamación territorial sobre Isla de Aves y el archipiélago de Los Testigos.
Hacia los años 90 la reclamación hacia Venezuela tomó nuevas dimensiones al sumarse la Comunidad del Caribe (CARICOM) y la Organización de Estados del Caribe Oriental (OECO), lo que conlleva a la búsqueda de medios alternativos que promuevan respuestas mas eficaces a partir de esta presión política internacional.
Un problema de delimitación para los Estados que integran la Organización de Estados de Caribe (OECO) es la existencia de la isla de Aves, situada a una distancia de 400 millas de las costas de dichos Estados. Venezuela rige isla de Aves desde 1865, año en que fue reconocida la soberanía sobre esa isla, tanto por el imperio británico como por el imperio español. Sin embargo, ninguno de los Estados de dicha organización está dispuesto a conceder a isla de Aves plena validez en cualquier acuerdo de delimitación, alegando que es un peñasco lo que significa que si no es isla entonces no genera mar territorial, ni una zona económica exclusiva ni zona contigua, dificultando así la concertación de convenios de esa índole con Venezuela.
Antes de dar un criterio en cuanto a las líneas de acción a seguir del tema en cuestión, es bueno analizar cuál es la realidad y el estatus de las áreas marítimas de Venezuela con respecto a los países vecinos del Caribe:
Venezuela presenta una fachada insular manifiesta de forma paralela a su costa, constituida por tres grupos de islas: en el primer grupo se encuentran las islas, islotes y cayos costaneros pertenecientes a los parques nacionales.
Un segundo grupo intermedio se ubica fuera del mar territorial y lo integran los archipiélagos Los Monjes, Los Roques, La Orchila, Los Hermanos, Los Testigos y las islas La Tortuga y la Blanquilla. Finalmente, el tercer grupo esta en el punto geográfico màs distante de la Venezuela continental, allí se encuentra la pequeña isla de Aves.
La política exterior de Venezuela hacia el Caribe ha sido respetuosa, de hecho se han suscrito cinco tratados de delimitación con igual número de países: Con el Reino de los Países Bajos (Saba y San Eustaquio, 31 de Marzo de 1978); con Estados Unidos de América (Puerto Rico e Islas Vírgenes, 28 de Mayo de 1978); con República Dominicana (3 de Mayo de 1979) y con Trinidad y Tobago (6 de Noviembre de 1979).
Líneas de acción a seguir:
• Mantener una política exterior de Estado con respecto a su soberanía sobre Isla de Aves. Venezuela no debe alejarse de las mesas de negociaciones con estos países, ya que esto deterioraría la dinámica armónica que siempre se ha mantenido en la región.
• Con la creación del CARICOM, quienes poseen una novedosa postura y la misma favorece a los miembros de la OECO y su reclamo, Venezuela deberá recrear modernos planteamientos.
• Exige de Venezuela un cambio de percepción de la manera de cómo se han comprendido las relaciones diplomáticas en la región.
• Mayor énfasis político en el Caribe, es decir, que no sería del todo inapropiado que Venezuela profundizara sus lazos aún màs con cada uno de los países que integran CARICOM.
• Combinación de negociadores competentes y calificados que van a preparar las posibles soluciones de los problemas de Derecho del Mar. Realizar un trabajo perseverante previo, considerando los espacios de acción establecidos en el Derecho Internacional y las decisiones de la Corte Internacional que le sirvan como base.
• Resolver por medios pacíficos las controversias relativas a la aplicación o interpretación de la Convención de las Naciones Unidas para el Derecho del Mar.
Hoy en dìa adquiere relevante importancia la visión integral de los espacios costeros y marítimos, el manejo de los recursos, los aspectos ecológicos y el papel del mar en las transformaciones constantes del cambio global. Al mismo tiempo una gran cantidad de iniciativas científicas y técnicas se dedican a los problemas específicos del mar. Es de esperar una mayor cooperación y entendimiento entre los países caribeños y Venezuela lo que conlleva a un mejor entendimiento y a la vida armoniosa que los que aquí vivimos tenemos y deseamos continuar teniendo.
Miguel Peraza
C.I 18.313.162
La política exterior venezolana hacia el Caribe conlleva una visión muy atractiva y respetuosa, aunque la realidad ha establecido incómodos impasses y acciones pocos cordiales que han matizado las relaciones en la región. Pero, por otro lado, se han logrado delimitar una buena parte de las fronteras marítimas gracias a que se han suscrito cinco tratados de delimitación con igual número de países:
• Estados Unidos de América.(1978)
• Reino de los Países Bajos. (1978)
• República Dominicana
• República Francesa (1980)
• Trinidad-Tobago (1990)
Mediante buenas políticas de negociación equitativas y entendimiento. De igual forma, desde el punto de vista económico, las economías del Caribe representan para nuestro país un mercado atractivo y con perspectivas de crecimiento a futuro en la medida en que avancen las iniciativas de acercamiento político y económico entre las dos partes.
Es relevante destacar que el área del Caribe constituye una prioridad para nuestro país, porque todavía quedan por resolver delimitaciones de áreas marinas y submarinas con algunos de los países caribeños como: (Dominica, Granada, Santa Lucía y San Vicente) a nivel bilateral, pues nuestra salida al Atlántico se ve bloqueada por el rosario de islas que comprende esta zona geográfica (entre ellas, la República de Trinidad y Tobago).
Al respecto, Venezuela debe seguir la delimitación de áreas marinas y submarinas entre Venezuela y los países caribeños ya mencionados, y en base a los antecedentes ya estudiados en clases, con las siguientes recomendaciones:
• Considerando que como recomendación primordial seria, la negociación, ya que se ha perfilado como una herramienta eficaz para resolver los problemas.
• Crear una comisión que garantice la zona marítima exclusiva y deben ser acordes con la costa venezolana y con el peso continental e insular de Venezuela, es decir sea acorde con la importancia continental e insular.
• Buscar la negociación equitativa y bilateral con Dominica, Granada, Santa Lucía y San Vicente y no como Bloque como lo han ratificado por medio de CARICOM y OECO.
• Creación de una comisión mixta para la búsqueda de diversos métodos de delimitación buscando la solución equitativa y no la equidistancia.
• Promover las relaciones bilaterales desde del punto de vista económico, político y cultural por medio de acuerdo y cooperación. Para así mejorar las relaciones entre las partes.
• Lograr que la delimitación sea de manera bilateral y que cuente con un equipo de personas especializadas y de acuerdo con los intereses de la nación, que nuestros representantes en esas futuras negociaciones no deben decaer en la tarea de lograr que estas islas (Dominica, San Vicente y Santa Lucia), reconozcan a nuestra Isla de Aves, como el punto de partida para cualquier delimitación de las áreas marinas y submarinas.
Reyes Reymary
C.I. 17105.871.
Feliz Navidad!!!:)
Pese a que Venezuela ha asumido siempre una posición de brazos abiertos con diferentes naciones, no es menos cierto que también ha estado alerta sobre la defensa y resguardo de su soberanía. Quizás por estás razón no firmó en su momento, en el año 1982, la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar.
Sus motivos, muy valederos: la posición asumida por países vecinos caribeños como St. Kitts-Nevis, Dominica, Santa Lucía, San Vicente, Granada y Monserrat, de conformar un frente común con fines muy confesables, el pretender cambiar la terminología Isla de Aves por el roca de Aves, con lo cual Venezuela dejaría de poseer una zona económica exclusiva de más de 75.000 kilómetros cuadrado y con ello una zona privilegiada el desarrollo económico y social del país.
Razón tenían entonces las autoridades venezolanas cuando en 1982 se rehusaron a formar parte y, por ende, a firmar el Informe de la Convención de las Naciones Unidas sobre Derechos del Mar, con el cual se adelantaría una política de cooperación internacional en materia de elaboración de tratados.
Más aún, cuando en ese tratado se establecieron los lineamientos principales de una normativa que pretendía legislar la compleja totalidad de los espacios marítimos del mundo, a partir de las fuentes de derecho convencional y habitual sin dejar de lado la posición de los países participantes.
Si bien es cierto que mucha de las naciones asistentes a este evento tuvieron ciertos puntos de coincidencia en cuanto a temas del mar, no lo es menos que otros asumieron posiciones más radicales e intransigentes. De hecho, los países del caribe oriental que no reconocían la categoría de Isla, de la Isla de Aves, justificaban su reclamo en el Parágrafo Tercero del Artículo 121 de la Convención del Derecho del Mar de 1982, por lo que Venezuela que ya había fijado su posición decidió expresar su inconformidad con el ordenamiento jurídico que presentaba dicho informe y más aún dichos articulados.
Basta recordar las palabras del entonces Jefe de la Delegación de Venezuela, el Embajador Andrés Aguilar M., quien tuvo la responsabilidad de representar a nuestro país en la ciudad de Montego Bay en 1982 y quien fue la persona que dirigió una enfática declaración a la plenaria, un día antes de la firma de la Convención del Derecho del Mar, en donde expuso la plena indisposición del Estado Venezolano por asumir las obligaciones y compromisos que se expresaban en el texto final de la convención, en especial, en lo referente a los Artículos 15, 74, 83, 121 y 309.
Así el artículo 121, señala:
“Régimen de las Islas: 1) Una isla es una extensión natural de tierra, rodeada de agua, que se encuentra sobre el nivel de ésta en pleamar. 2) Salvo lo dispuesto en el parágrafo 3, el mar territorial, la zona contigua, la zona económica exclusiva y la plataforma continental de una isla serán determinados de conformidad con las disposiciones de esta convención aplicables a otras extensiones terrestres. 3) Las rocas no aptas para mantener habitación humana o vida económica propia no tendrán zona económica exclusiva ni plataforma continental.”
Por lo que la Isla de Aves es, a juicio de la Convención del Derecho del Mar y según su terminología, una roca, así que Isla de Aves debería ser conocida como Roca de Aves, con lo cual Venezuela dejaría de poseer una zona económica exclusiva de más de 75.000 kilómetros cuadrados.
Por ese primer y especial aspecto, Venezuela no pudo aceptar el texto de la Convención de lleno, y aunque podía firmar y ratificar la Convención del Derecho del Mar de 1982 en su totalidad haciendo alusión a una reserva con respecto a ese Artículo y a los otros que cuestión, la reunión de Montego Bay inclinó a la mayoría de los países presentes para la ocasión en inscribir un Artículo en el texto final que, se puede decir es una completa novedad en la Teoría del Derecho de los Tratados, nos referimos al Artículo 309, y el cual dice:
“Reservas y Excepciones: No se podrán formular reservas ni excepciones a esta Convención, salvo las expresamente autorizadas por otros artículos de la Convención”
Así, Venezuela no pudo conocer un canal lo suficientemente flexible como para firmar y ratificar la Convención y, en el mismo tiempo, hacer reservas sobre el mismo en algunos de sus artículos. Cosa curiosa y contradictoria, pues para mantener los postulados de la Convención en el tiempo, se busco durante todos los años de las discusiones un formato jurídico flexible para los miembros.
Visto lo antes expuesto podemos deducir que dada las posiciones incompatibles de algunos países del Caribe Oriental que abiertamente reflejan situaciones muy particulares, antagónicas y hasta difíciles con respecto a Venezuela, no es descabellado pensar entonces que nuestros país deberá generar políticas estratégicas en procura de esbozar políticas de acción con respecto a las delimitaciones con los otros países del Caribe, dándole prioridad a la seguridad del Estado venezolano y al reforzamiento de su política exterior con miras de frenar y asegurar nuestras aguas, islas y territorio. Un escenario verdaderamente complejo pero a la vez un reto para nuestro país.
Francisco Milano
16.900.903
Al abordar el tema es evidente que los objetivos de algunos países del Caribe Oriental vienen a presentar un verdadero reto para la diplomacia venezolana que debe ser enunciada en pro de la defensa de los intereses y la soberanía territorial en el Caribe, primeramente se debe impulsar una negociación con la (OECO), bajo un ambiente de integración y hermandad debido a las consideraciones geoestratégicas, geopolíticas y de seguridad implícitas en el área.
La estrategia a seguir podría comenzar en un gradual reducción de las pretensiones iníciales de la (OECO), a través de una maniobra de ajuste como podría ser la persuasión y el hacer cambiar la hostilidad de algunos cancilleres caribeños en relación a la polémica territorial que recientemente han planteado.
Se trataría de llevar esas aspiraciones infundadas jurídicamente a un medio de conciliación, lo que sería un segundo intento formal después del rechazo que ha tenido la propuesta de llegar a un arreglo a través de la negociación bilateral con cada uno de los islas países demandantes, propuesta que después ellos mismos la han querido reavivar bajo una negociación en bloque o en conjunto,es decir, en el marco de la Organización de los Estados del Caribe Oriental (OECO), la intención venezolana debe guiarse a que la (OECO) de claras señales en el transcurso del tiempo de tener una disposición favorable para negociar los acuerdos de delimitación pendientes, y continuar con la estrategia de ir ganado aliados según los acuerdos que han sido firmados en materia energética con el carácter de integración y solidaridad que se le ha dado como lo son: el Acuerdo de Cooperación Energética de Caracas del 2000, y el Acuerdo de Petrocaribe del 2005, entre otros., que con sus respectivos avances y adicionandole coherencia en las acciones y decisiones de la política exterior venezolana en el Caribe, se podría lograr una solución conciliadora y satisfactoria para ambas partes, en donde los países de la (OECO) tendrían que admitir la soberanía de Venezuela sobre la Isla de Aves, o darle algún grado legitimidad a la Isla de Aves, como un punto de referencia para la delimitación de las áreas marinas comprometidas, o como es el caso del reconocimiento de la jurisdicción marítima que genera el Archipiélago Los Testigos en un posible acuerdo delimitación con Granada y San Vicente & las Granadinas, además se podría incluir en el caso de un posible acuerdo de delimitación en relación a la Isla de Aves, una referencia a los acuerdos de delimitación con Francia (Guadalupe y Martinica), que son fronterizas a la isla de Dominica todo esto con el deseo de convenir una serie tratados de límites favorables para ambas partes priorizando el principio de la división equitativa sobre la equidistancia.
Bellorín S., José A.
Carlos Sierra
CI: 18.540.858
Son muchos los problemas limítrofes que Venezuela a afrontado desde el momento mismo que se planto en el plano internacional como una Republica Independiente y soberana, y de estos problemas hay algunos que actualmente se mantienen vigentes a pesar de las muchas décadas que han transcurrido desde aquel entonces, como es el caso de estudio de este análisis que son los problemas limítrofes con respecto a la zona del Caribe.
Gran parte de la fachada marítima que posee el estado venezolano esta comprendida por costas caribeñas, lo que mas puntualmente se puede aproximar a unos 2.260 Km, que están proyectados hacia el mar caribe razón por la cual colindan con gran cantidad de islas, en este punto nace la necesidad de crear una delimitación de áreas marinas y submarinas precisa con cada una de estas islas y así cada quien pueda hacer uso de su soberanía sin atentar en contra de los otros, hay que destacar que además de lo antes expuesto hay que recalcar la importancia geoestratégica que nos da el mar Caribe y de aquí otro punto mas para dejar en claro hasta que punto tiene alcance nuestra soberanía, recordemos también que en esta zona de disputa tenemos intereses comerciales de vital importancia, cosa que resalta aun mas la necesidad de llegar a un acuerdo sobre estas polémicas disputas.
Uno de los puntos importantes a destacar del porque es importante la delimitación de áreas marinas y submarinas entre Venezuela y algunos países como Colombia, Países Bajos y República Dominicana, es que el mar caribe es semicerrado, es decir, según lo plantea la Convención de Derechos del Mar en el articulo Nº 122, el mar cerrado a semicerrado es un golfo, dársena, o mar rodeado por dos o mas Estados y comunicado con el mar abierto por una salida estrecha o consistente enteramente o fundamentalmente en mares territoriales y zonas económicas exclusivas de dos o mas Estados ribereños.
En la materia de delimitación de áreas marinas y submarinas hay que destacar el tratado de delimitación de fronteras marítimas suscrito el 28 de mayo de 1978 entre Venezuela y los Estados Unidos en el cual se traza la delimitación entre las islas de jurisdicción Estadounidense (Santa Cruz y Puerto Rico) y la isla de jurisdicción Venezolana “Isla de Aves”. Además de esto en este tratado también se reconoce la soberanía de Venezuela sobre el Archipiélago de las Aves, Archipiélago de los Roques y la ya mencionada Isla de Aves.
La isla de Aves mencionada anteriormente va a ser la piedra angular de este análisis debido a que a que existen actuales discusiones sobre la delimitación de áreas marinas y submarinas en base a esta isla de posesión Venezolana pero que países como Dominica, Granada, Santa Lucía, San Vicente, San Kitts y Nevis y la isla de Montserrat no aceptan que las delimitacion se realicen en base a dicha isla, ya que no reconocen a la Isla de Aves como una Isla, la reconocen como una Roca, y se basan en el numeral 3 del Artículo 121 de La Convención del Derecho del Mar de 1982 para argumentar que dicha Roca no genera derecho a Venezuela para reclamar una Zona Económica Exclusiva ni una Plataforma Continental. Recordemos que la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, en su artículo 121 establece una serie de condiciones sobre el régimen de las islas:
1) Una isla es una extensión natural de tierra, rodeada de agua, que se encuentra sobre el nivel de ésta en pleamar.
2) Salvo lo dispuesto en el parágrafo 3, el mar territorial, la zona contigua, la zona económica exclusiva y la plataforma continental de una isla serán determinados de conformidad con las disposiciones de esta convención aplicables a otras extensiones terrestres.
3) Las rocas no aptas para mantener habitación humana o vida económica propia no tendrán zona económica exclusiva ni plataforma continental.
Si el argumento de Dominica, Granada, Santa Lucía, San Vicente, San Kitts y Nevis se base en el párrafo 3 de este articulo podemos desestimar tales basamentos con recordar que Isla de Aves es desde hace muchas décadas atrás una zona donde hay una alta actividad económica que se produce mediante la explotación del guano, además de esto en ella hay presencia humana ya que allí habitan militares que se encargan de velar por la protección de nuestra isla al igual que científicos y ecologistas que llevan a cabo numerosas investigaciones, y para llenar el recuadro Isla de Aves cumple con los dos primeros párrafos del citado articulo.
Aun con todo esto Venezuela opto por no firmar la Convención del Derecho del Mar de 1982 para no arriesgarse a perder la Isla de Aves y no perder con ello una amplia zona económica exclusiva, en un principio se planteo la posibilidad de firmar la convención y crear una reserva con respecto al articulo 121, pero la convención plantea en el articulo 309 que no se puede hacer reserva alguna a ningún articulo de dicha convención
Otro apoyo que tenemos a la hora de establecer a la isla de aves como un punto de referencia para las delimitaciones marinas y submarinas es el tratado de 1978 mencionado un par de párrafos atrás, debido a que este sienta un precedente en el cual Estados Unidos reconoce la totalidad de las áreas marítimas de todas las islas venezolanas involucradas y esto puede ser utilizado como argumento a la hora de plantear la posición venezolana en el caso.
Por otra parte Dominica, Granada, Santa Lucía, San Vicente, San Kitts y Nevis conglomerados por medio de la OECO (Organización de Estados del Caribe Oriental) plantea su interés de tratar de resolver el problema mediante una serie de negociaciones que van a ser instauradas de manera multilateral cosa que no beneficia para nada a Venezuela ya que seria en bloque de OECO contra Venezuela. La manera ideal y más conveniente que tiene Venezuela para resolver el conflicto alcanzando sus objetivos es llegar a la discusión frente a frente, es decir de manera bilateral ya que recordemos que lo ideal para resolver los problemas de fronteras es que lo hagan uno a uno los sujetos involucrados.
En resumen los argumentos que sostiene Venezuela son de peso y muy seguramente mediante ellos podremos lograr nuestros objetivos en la negociación, enfocándonos en que sí cumplimos en lo estipulado en el articulo 121 de la III Conferencia de las Naciones Unidas sobre Derecho del Mar de 1982, que ya hemos obtenido previo reconocimiento de otros países como Estados Unidos en 1978 y discutiendo el tema de manera bilateral con cada una de las islas por separado y que de discutirse de manera multilateral se debe hacer por medio de organismos como CARICOM. No esta demás aprovechar oportunidades como la Conferencia de los países latinoamericanos y del Caribe realizada el día de ayer en Brasil para crear acercamiento entre Venezuela y los países del caribe y ver si finalmente se concreta un acuerdo, en lugar de tener en mente otras cosas que en lugar de ser provechosas para el país pueden tender a llevarnos a la decadencia como lo son la reelección indefinida, cosa que no podía dejar de mencionar en el presente análisis, y en este punto aclaro que con acercamiento a los países del caribe no me refiero a regalarles dinero o materia prima como se ha venido haciendo sino utilizando otras vías como los programas de cooperación conjunta u otros.
Es deber de todo país, el establecer sus límites marítimos y más aún en el caso de Venezuela la cual posee una fachada litoral en el Caribe de 2.718 km. Su posición dentro del mismo, aunado a los privilegios inherentes a la posesión de costas como sería la zona económica exclusiva marítima, permite considerar a Venezuela como nación caribeña, limítrofe con nuevos países y potencias mundiales, constituyéndose el Mar Caribe en un espacio de interacción donde convergen los intereses estratégicos, políticos y económicos.
De esta manera, resulta importante la delimitación de las fronteras marítimas, entendiéndose por éstas, según Kaldone Nweided, en su obra intitulada: “Frontera y Limite en su Marco Mundial” como: “La Fachada Marítima de un país, en cuanto frontera abierta al mar, sus rutas, comunicaciones y relaciones…la frontera en donde entran en juego intereses geopolíticos y económicos típicamente marítimos en la zona marítima inmediata a la costa, como la seguridad de la navegación, el ejercicio de la pesca, el control de la contaminación del medio marino y costero y, frecuentemente, la extracción de los recursos marinos y submarinos”(Nweihed, 1992). Vemos así, como al momento de negociar un acuerdo de delimitación entre Estados, hay un número de consideraciones que deberían ser tomadas en cuenta.
En el caso de Venezuela, ésta ha suscrito tratados de delimitación con diversos países caribeños: con Estados Unidos en 1978 por los territorios de Puerto Rico y Santa Cruz; las Antillas Neerlandesas en 1978 por los territorios de Aruba, Curacao y Bonaire; con Francia en 1980 por los territorios de Guadalupe y Martinica; y con Trinidad y Tobago en 1990; lográndose así, un acuerdo satisfactorio entre las partes involucradas. Contrario a esto, no se ha concretado acuerdos de delimitación con: Dominica, Granada, San Vicente, Santa Lucía, San Kitts- Nevis, Monserrat quienes tienen una reclamación territorial sobre Isla de Aves y Archipiélago Los Testigos.
Para llevar a feliz término los futuros acuerdos, éstos deben tomar como referencia los tratados ya establecidos a la hora de fundamentar proyectos de delimitaciones fronterizas con los países con los que no se ha concretado acuerdos limítrofes.
Al momento de establecer una negociación, por tratarse de delimitaciones, es menester que el acuerdo que proceda sea de carácter bilateral por tratarse de condiciones específicas y que éstos se rijan por principios equitativos en cuanto a la preservación de derechos e intereses. Mas a este respecto Venezuela ha encontrado trabas en su camino, ya que una vez que se crea la CARICOM, los países miembros (con los cuales Venezuela aún no ha delimitado) establecen como criterio único el negociar como un bloque ante Venezuela y no Estado por Estado como debería hacerse, ya que, es necesario que lo acordado obedezca a las condiciones geográficas propias de cada Estado.
A su vez, resulta importante señalar, que si bien Venezuela se adhiere a la mayoría de los principios emanados de la III Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (1982), no acepta el concepto de Isla establecido por la misma, lo cual ha sido causal de molestia para el resto de los países caribeños (con los cuales no se han establecido limites) ya que consideran que Isla de Aves, no es una isla.
Ahora bien, Venezuela, no puede dar marcha atrás en admitir el nuevo concepto de isla, pues sería desconocer los tratados ya establecidos con EEUU y Holanda (en el caso de reconocimiento de la Isla de Aves). Por lo tanto, cualquier futura negociación debería plantearse a la luz de otros principios, pues en caso de replantearse el tema seria desconocer límites precisos y ya definidos, concernientes a la actividad económica que se genera y a la habitabilidad humana en la misma.
Resulta incluso algo contradictorio, que si bien el CARICOM, persigue una política exterior común, no todos sus miembros mantienen las mismas relaciones con respecto a Venezuela en materia de delimitación. Para establecer algún criterio de demarcación de límites, es necesaria la creación de comisiones expertas en el tema y que sean éstas las encargadas de instaurar el punto de partida sobre el cual se fundamenten las negociaciones.
En el caso venezolano siempre en defensa de nuestra soberanía territorial, en continuidad con las políticas anteriores que se han preocupado en reafirmar la soberanía sobre la Isla de Aves y los derechos que genera.
Es fundamental que las partes que se sometan a la demarcación, tomen en cuenta los juicios establecidos por la comisión de Expertos para determinar los puntos de partida indicados. Así mismo, la negociación futura deberá enmarcarse en la cooperación y si es necesaria la concesión, con respecto al libre tránsito de navegación, la explotación de recursos, acuerdos energéticos, etc, en pro de la conformidad de intereses, siendo un elemento que debe estar presente en las negociaciones, de tal manera que se llegue a un acuerdo donde reine la equidad.
Mirna Quintero
C.I.:18.683.212
La delimitación de las aguas marinas y submarinas de Venezuela representa un asunto prioritario para el país, especialmente en el Caribe oriental, donde Venezuela aún no ha concretado la demarcación con varios Estados de la zona, es el caso de Dominica, Granada, Saint Kitts y Nevis, Santa Lucía, San Vicente y Granadinas, y la colonia británica de Montserrat. Es por ello, que la soberanía de Venezuela sobre sus espacios marítimos en el Caribe es un tema de alto interés nacional, aunado al hecho de la importancia económica que representa esta zona, además de la gran potencialidad en recursos naturales que pudiesen redundar en beneficios en el futuro.
Venezuela logró importantes avances en la materia durante el siglo XX, cuando firmó acuerdos limítrofes con Estados Unidos y con Holanda, ambos en 1978, y con Francia en 1980, países que además reconocieron la soberanía venezolana sobre la Isla de Aves, que ha representado una de las situaciones más controvertidas para nuestro país con sus vecinos del Caribe.
En este caso, varios Estados del Caribe Oriental han puesto en duda la posesión venezolana sobre la Isla de Aves y han expresado su inconformidad con el hecho de que mantengamos presencia en la mencionada isla. El hecho más resaltante en cuanto a esta controversia se dio en el año 2001, cuando Dominica denunció la ocupación de la Isla de Aves por parte de Venezuela durante una cumbre del CARICOM, reclamo que fue apoyado por los gobiernos de Barbados, Saint Kitts y Nevis, Santa Lucía, y San Vicente y Granadinas.
Entendiendo que Dominica reivindica la Isla de Aves como suya, y ha solicitado el retiro de Venezuela de la misma, nuestro país ha sabido llevar la controversia iniciando programas de cooperación regional con los países de la zona, como por ejemplo PETROCARIBE, y de igual forma ha logrado que Dominica se haya incorporado al ALBA, siendo éste el único país del Caribe Oriental que hasta ahora se ha unido a esa agrupación.
Al momento de recomendar algunas líneas de acción que Venezuela debería llevar a cabo en el tema de la demarcación de aguas marinas y submarinas con sus vecinos caribeños, considero lo siguiente:
- Se debe continuar con la política de cooperación e intercambio con los Estados del Caribe Oriental, mediante las iniciativas de integración que se han venido desarrollando, las cuales sirven como un instrumento para afianzar las relaciones entre Venezuela y el CARICOM, pues no podemos olvidar que varios de sus miembros observan a Venezuela con recelo y como un Estado hegemónico por la ocupación de la Isla de Aves y por el litigio con Guyana, país que pertenece a esa organización.
- Venezuela debe negociar la demarcación limítrofe con cada Estado del Caribe de forma bilateral y no en bloque, para así poder establecer de forma precisa y sin influencias exógenas, los intereses de cada una las partes que participen en la negociación.
- Venezuela debe realizar los estudios e investigaciones científicas pertinentes que le permitan tomar medidas a futuro en cuanto a la posibilidad de que la Isla de Aves desaparezca, pues es bien sabido que la misma ha disminuido progresivamente el tamaño de su superficie por efecto de los fenómenos naturales que se presentan en la región.
- Venezuela debe reforzar su presencia en la zona en materia de seguridad, con el fin de prevenir actividades ilícitas en su espacio marítimo, lo cual impediría que otros países con intereses en la zona hagan señalamientos hacia Venezuela por no ocuparse de atender efectivamente los espacios que reivindicamos como nuestros.
- Se debe establecer una comisión técnica que se encargue de trabajar en la demarcación de las aguas marinas y submarinas de nuestro país. De esa manera, se podrían evitar controversias como la suscitada en el presente año 2008 con Barbados, cuando su gobierno entregó licencias de exploración de hidrocarburos a empresas extranjeras en aguas que son reivindicadas como venezolanas.
- Venezuela debe elaborar los estudios que sean necesarios para conocer con certeza los recursos naturales y las potencialidades que pueden ofrecer estos espacios marítimos para el beneficio futuro de la nación.
Finalmente, considero que se debe impulsar la formación de expertos y técnicos especializados el estudio y la demarcación de los límites marítimos con los Estados del Caribe, para llevar a cabo las negociaciones futuras con el objetivo de obtener los mejores resultados posibles para nuestro país en un área de especial interés estratégico, geopolítico y económico como lo es el Mar Caribe.
Jesús M. Yánez S.
C.I. 18.493.043
El acertijo de la isla de aves es fundamental para entender cualquier tipo de delimitación de aguas marinas y submarinas realizada por Venezuela. Ese promontorio de tierra o conjunto de rocas, le da a Venezuela la facultad de poseer, en total, aproximadamente ciento cincuenta mil km2 de zona económica exclusiva y mar territorial. Sin duda alguna la isla de aves representa una fortaleza para la definición de nuestros espacios, por ende algunos estados colindantes han intentado disminuir su calidad de isla, y otorgarle la connotación de una simple agrupación rocosa sin vida económica y habitabilidad. La primera y fundamental línea de acción debe ser hacer respetar la isla de aves como generadora de mar territorial, zona contigua, plataforma continental y zona económica exclusiva como cualquier otra isla. La segunda línea de acción es utilizar la costumbre que ha sido una de las fuentes más importantes en el derecho internacional para legitimar la condición de la isla de aves como generadora de derechos sobre el mar, la costumbre siempre ha sido básica al manejar las relaciones internacionales y dictar las normas de cohabitación entre estados, hay que resaltar que ya se realizaron delimitaciones con Estados Unidos, Holanda y Francia, y estos han aceptado a la isla de aves como generadora de los 3 efectos. Es importante que Venezuela no sea incoherente con su discurso y siga manteniendo la postura que ya la ha llevado a delimitar aguas marinas y submarinas con otros estados. La tercera línea de acción, es el desconocimiento de los instrumentos, tratados o convenciones internacionales que menosprecien la cualidad de isla que posee la isla de aves como es el caso de la convención organizada por Naciones Unidas en la ciudad de Montego Bay, Jamaica, el 10 de diciembre de 1982. En la parte VIII de dicha convención donde especifica el régimen de las islas y su concepto expresa en su artículo 121, numeral 3: “Las rocas no aptas para mantener habitación humana o vida económica propia no tendrán zona económica exclusiva ni plataforma continental”. Venezuela debe seguir esta política, el necesario desconocimiento de este artículo del derecho del mar que sólo beneficia a segundos y terceros, y cualquiera que ratifique este instrumento, por ende no puede ir ni a un arbitraje ni a una medicación y debe obligatoria y necesariamente negociar de manera bilateral. La cuarta línea sería más política que diplomática, la política exterior del gobierno actual que ya lleva 10 años ha sido generosa con el Caribe, Dominica pertenece al ALBA y PETROCARIBE tiene dentro de su estructura de precios confortables y flexibilidad de pago a todas las naciones caribeñas excepto Haití, Barbados y Trinidad y Tobago. En ese sentido sería importante que nuestra cancillería le instara a los países del Caribe que no han firmado con nosotros las delimitaciones de áreas marinas y submarinas a que cooperen para estrechar los lazos y el vínculo de Venezuela con el Caribe reconociendo a la isla de aves como tal y así evitar conflictos innecesarios, siendo recíprocos con nuestra solidaridad. Mientras nosotros le entregamos petróleo a cómodas cuotas y les garantizamos energía con bajos intereses, ellos deberían eliminar la controversia y las discrepancias con la isla. No tiene sentido que Venezuela siga cooperando en el área social y energética y que a la hora de delimitar fronteras y áreas marinas y submarinas ese esfuerzo no los exhorte a firmar y ceder.
En conclusión las cuatro líneas de acción son: Firmar de manera bilateral y desconocer las convenciones de derecho del mar contrarias a nuestros intereses. Ratificar la isla de aves como tal. Legitimar la isla de aves usando el aval que representa haber firmado con Estados Unidos, Francia y Holanda. Utilizar petrocaribe y otros modelos de integración caribeño para presionar a los países con los que cooperamos. Venezuela debe poner más empeño en las delimitaciones de sus áreas marinas y submarinas, los avances científicos han descubierto las riquezas que tienen la plataforma continental (minerales, gas, hidrocarburos etc.), además es conocida la riqueza pesquera que posee el mar Caribe al norte, este y oeste de la isla de aves. Nuestra posición geopolítica se fortalecería más consolidando nuestra soberanía en el mar caribeño, es trascendental entonces firmar los acuerdos con el obligatorio reconocimiento de la isla de aves.
Milagros Carolina Cruz Martínez
CI 18.600.809
Durante el gobierno del Presidente Caldera y después seguido por Carlos Andrés Pérez se inició una política de acercamiento hacia el Caribe, en especial hacia el anglo caribe sobre la base de la cooperación Sur-Sur y el diálogo Norte-Sur. Entre los mecanismos de acercamiento, cabe citar algunos aspectos:
En los años 70, se da el ingreso de Venezuela al Banco de Desarrollo del Caribe, lo cual maraca la presencia institucional de Venezuela.
En 1974, durante el gobierno de CAP, se llevo a cabo la cumbre de Jefes de Estado, de Centroamérica y el Caribe, donde se definió el “Primer Programa de Cooperación financiera con América Central y el Caribe”. Durante este periodo, Pérez perfiló una política hacia el Caribe dando prioridad a la Cooperación Económica
En 1980, se suscribió con México el Acuerdo de San José para el suministro de hidrocarburos a países centroamericanos y del Caribe en condiciones favorables.
En 1989, Carlos Andrés Pérez solicita el ingreso de Venezuela al CARICOM, allí se acordó establecer un grupo de trabajo entre CARICOM y Venezuela para estudiar la integración de América Latina y el Caribe, ingreso que es aprobado en 1990, entrando como observadora.
En 1990, con el G-3 se conviene una estrategia de aproximación hacia el Caribe. Se lleva a cabo en 1993 una Cumbre G3-Caricom.
En la Constitución de 1999, se consagra como principio la importancia de la integración latinoamericana y Caribeña.
Estos pequeños antecedentes de nuestras relaciones para el Caribe, nos dice que tenemos una historia común de acercamiento y de relaciones, por lo cual se debe favorecer el acercamiento a través de mecanismos de integración para así poder llegar a establecer los acuerdos de delimitación pendientes en base a la equidad. No sólo es conveniente el acercamiento por las delimitaciones pendientes, sino en vista de que el área del Caribe tiene una gran importancia geopolítica y geoestratégica por ser paso de corredores estratégicos aéreos y marítimos por lo cual es preciso orientar políticas de acercamiento e intercambio que lleven a términos favorables.
En base a lo expuesto y considerando las alternativas favorables para las delimitaciones pendientes con Dominica, Granada, Santa Lucía y San Vicente, se recomienda:
Lo primero es el acercamiento con estos países. Se recomienda establecer mecanismos para tratar alternativas de cooperación e integración, aunado al tema limítrofe (enfoque de “globalidad”). Entre los temas de integración se puede incluir: acuerdos pesqueros (Como en el caso de Trinidad), acuerdos de protección ecológica, fortalecer la presencia cultural, incluir temas de agricultura, ciencia y tecnología, transporte, salud, medio ambiente, desarrollo sustentable, turismo.
Tener en Cuenta los antecedentes de las delimitaciones con EEUU (1978), República Dominicana (1979), Holanda (1978), Francia (1980), y Trinidad y Tobago (1990). Analizar las motivaciones y la negociación.
El establecimiento de comisiones binacionales especializadas que trabajen en torno al criterio de la equidad en base a las delimitaciones justas, tratando en primer lugar de resolver el criterio en torno a la Isla de Aves, lo cual puede resultar difícil ya que estas islas han planteado su posición de negociar en bloque, por lo cual se ha recomendado en primera instancia fortalecer el acercamiento en base a la integración.
Atte.
Gelcia Joana Montoya
¡¡¡¡Feliz Navidad ¡¡¡¡
La privilegiada posición geoestratégica de Venezuela ha sido, como hemos analizado a lo largo del semestre, causal en más de una oportunidad de diferendos o controversias de carácter limítrofe, y, como también hemos estudiado, los resultados en la mayoría de los casos han sido desventajosos y hasta perjudiciales para el Estado venezolano. Pero en el momento en que se adoptan conceptos tales como zona económica exclusiva, plataforma continental y mar territorial, la complejidad en las relaciones internacionales aumenta significativamente. Y es cuando cobra importancia el reconocimiento de la isla de aves como isla, entre otros.
El convenio sobre la isla de aves de 1859 constituye una prueba irrefutable de la importancia económica de dicha isla. Es aquí donde se establece la negociación directa como mecanismo de solución de controversias que pudieren surgir con motivo de la interpretación o aplicación del mismo. Ciertamente la negociación es la técnica que durante mucho tiempo se ha aplicado pero los resultados no han sido efectivos, así que una de mis propuestas para la resolución de los problemas limítrofes con los países caribeños, se basa fundamentalmente en la cooperación. No expreso que es necesario abandonar la negociación sino que hay que complementarla. Es necesario estimular la cooperación y otros medios alternativos como medios de resolución de conflictos. A través de este medio se dinamizan las relaciones y se permite alcanzar soluciones beneficiosas para todas las partes. Además de estimular el trabajo conjunto de los países caribeños en el desarrollo de la región. Sin dejar a un lado la participación de organismos tales como el CARICOM.
Para que el proceso de negociación sea efectivo es necesario fomentar el desarrollo de relaciones armónicas en el caribe, que permitan suscribir tratados bilaterales con el fin de resolver los problemas limítrofes entre naciones sin injerencias extrajeras.
Además es necesario resaltar a nivel nacional e internacional, la importancia tanto económica como cultural de la presencia de Venezuela en el caribe.
En cuanto al reconocimiento de la isla de aves como isla, considero que no debe ser objeto de negociación, basándose en los distintos instrumentos legales que han sido suscritos con anterioridad por países como Estados unidos, Francia y holanda, que la reconocen como tal. Debe ser un elemento de presencia obligatoria en todos los tratados que se suscriban con los países caribeños en pro del desarrollo de la región y de la resolución de las otras divergencias territoriales y marítimas que tengan lugar.
Sara Ruiz Milian
18.029.185
Mis mejores deseos para todos en esta navidad!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Maria de los Angeles Alvarez
Venezuela en su mar territorial posee a lo largo de sus costas continentales e insulares una anchura de 22.224 Km., es decir 12 millas náuticas, medidas a partir de la línea de las mas baja marea o desde líneas de base recta en determinadas regiones donde se justifique, como en la desembocadura de los ríos etc; las aguas comprendidas dentro de la línea de base recta y la costa son aguas interiores del territorio nacional, en el se encuentran las islas, islotes y cayos que pertenecen a los parques nacionales, además existe otro grupo de posesiones insulares que se ubica fuera del mar territorial y lo integran archipiélagos como los roques, la Orchila, los Hermanos, los Testigos y las islas la Tortuga y la Blanquilla, estas pertenecen a la soberanía venezolana por lo históricamente establecido en el año 1777 bajo el principio del Iuti Possideti Juri concedido a lo que fue la Capitanía General de Venezuela.
Finalmente se encuentra la Isla de Aves la cual esta situada a 15º 30’ a unos 509 Km., es una de las mas aisladas e inhóspitas del Mar Caribe y constituye la máxima avanzada de las costas continentales de Venezuela y según Alfredo Torrealba “la soberanía de Venezuela sobre Isla de Aves surge de la Real Cédula de 1.777 que originó a la Capitanía General de Venezuela y a ello se suma una serie de tratados firmados con Estados Unidos, Francia y Holanda. Sin embargo, pese al reconocimiento de estas naciones de la soberanía de Venezuela sobre Isla de Aves, hay estados en el Caribe que no reconocen dicha soberanía, incluso, no la reconocen como tal, es decir, como una isla”.
Esta isla es de vital importancia para nuestro país debido a la gran extensión de Mar Territorial y Zona económica exclusiva que genera, el principal problema radica en que constituye el punto territorial a partir del cual Venezuela ejerce la negociación limítrofe con cuatro estados vecinos: Dominica, Sn. Kitts-Nevis, Monserrat y Santa Lucía, quienes reclaman, en fondo, que la Isla de Aves no es tal, sino un islote o roca, que agrega a la Zona Económica Exclusiva de Venezuela, aproximadamente, 75.000 kilómetros cuadrados, en perjuicio de su propia Zona Económica Exclusiva. Del mismo modo, Grenada y San Vicente reclaman que el Archipiélago Los Testigos atenta contra sus intereses marítimos.
En cuanto a las soluciones o a las recomendaciones pertinentes ante esta discrepancia fronteriza entre los Estados caribeños tenemos:
1. Establecimiento de una comisión negociadora que actué de manera directa con los países en conflicto para llegar a una solución justa y equilibrada para ambas partes.
2. Venezuela debería mantener entre sus estrategias las figuras de los acuerdos, tratados bilaterales y multilaterales donde se establezcan acuerdos de cooperación, complementariedad e integración en materia energética y tecnológica, tal como funciona el Petrocaribe y el Alba.
3. Otra de la vías de solución equitativa que permitiría a Venezuela la salida directa a la zona de Alta Mar es la aplicación del principio de no amputación de la salida al mar de un Estado, (dicho principio se aplica específicamente en la boca del Rió Esequibo para la determinación de la Zona Económica Exclusiva).
4. Venezuela debería invertir en investigación geofísica en Isla de Aves y todos aquellos territorios insulares que nos pertenecen en función de todas las coyunturas ambientales y meteorológicas que se han suscitado en estos últimos meses, y tomar las medidas apropiadas para evitar que este territorio de poca extensión desaparezca, ya que al desaparecer la zona económica exclusiva los otros países que están vinculados al conflicto aprovecharían la oportunidad para expandir su territorio.
Referencias:
- Rodríguez Díaz Alberto J, Cuéntanos de las fronteras de Venezuela, edit Suelo petrol, año 1995
- htm l TORREALBA, Alfredo. Áreas de interés de Venezuela en el Caribe: el conflicto de Isla de Aves y Archipiélago Los Testigos y la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar de 1982. [En Línea]. [Consulta: 15 de diciembre de 2008]. Disponible en: http://www.debatecultural.net/Nacionales/AlfredoTorrealba5
Roxani Gallegos C.I 16033491
Maria de los Angeles Alvarez
C.I. 17 427 530
Venezuela aún no ha podido establecer o delimitar el margen fronterizo de sus aguas territoriales con respecto a algunos países del Caribe oriental. De hecho, este último factor fue de tal peso que si el Estado venezolano hubiera aprobado la convención en 1982, tal cual como se expresaba, el país habría puesto en riesgo parte de su soberanía. De tal manera, que antes de ahondar en esta discusión del por qué Venezuela asumió esa postura en 1982,debemos tomar en cuenta cuál es la realidad y el status de las áreas marítimas de Venezuela con respecto a los países vecinos del Caribe.
Es importante destacar que ese extenso mar para Venezuela, representa más de 330 islas, cayos e islotes, conjuntamente con los suelos y subsuelos constituye un área de interés geopolítico para Venezuela y también un formidable reservorio natural de materias primas, razón por la cual es vital el inicio de acciones para brindarle seguridad y desarrollo basados en el nuevo derecho del mar. Por esa razón, no es inapropiado considerar que el área comparte un profundo interés geoestratégico tanto para Venezuela como para otras naciones del área caribeña.
Venezuela y la mayoría de los países del Caribe oriental siempre han tenido una relación comercial pro-activa en el plano comercial y cultural a lo largo de los últimos dos siglos, pero esto no ha sido lo mismo en lo que respecta a las relaciones de Venezuela con Dominica, Granada, Santa Lucía y San Vicente, Sn. Kitts-Nevis Monserrat ya que existe una reclamación territorial aún sin resolver
Es por ello que será recomendable que Venezuela mantenga una política exterior de Estado con respecto al respeto de su soberanía en su territorio, sin embargo, esto no querrá decir que el país debe alejarse de las mesas de negociaciones con estos países ya que esto deterioraría la dinámica armónica que siempre ha mantenido en la región.
El Caribe constituye una prioridad de la política exterior venezolana, porque, como lo explica el Profesor Humberto García Larralde (1999), con base en lo expresado en el Libro Amarillo del MRE correspondiente al año 1992, los votos que representa el Caribe, en el marco del CARICOM pueden significar un respaldo importante en foros y organismos internacionales que resulta relevante cultivar por parte de Venezuela; y las rutas marítimas de importación y exportación del país son vulnerables a las acciones que pudieran adelantar gobiernos hostiles que llegasen al poder en cualquiera de las
Islas, por lo que Venezuela debe promover relaciones con estos países para minimizar esa posibilidad. De igual forma, el autor nos dice que desde el punto de vista económico, las economías del Caribe representan para nuestro país un mercado no desestimable y con perspectivas de crecimiento futuro en la medida en que avancen iniciativas de acercamiento político y económico entre las dos partes.
Tomando en cuenta los consideraciones del Profesor Garcia Larralde Venezuela en este sentido debe promover acciones que le permitan obtener beneficios con los paises caribeños, si bien no se ha podido llegar a una solucion a el conflicto limitrofe que une a ambas partes, tenemos que tomar en cuenta que las relaciones economicas y culturales se han desarrollado y mas con el actual gobierno, es por ello que considero que nuestro pais debe mantener el rol de un buen negociador y aprovechar al maximo los beneficios que le trae estas relaciones con los paises caribeños mas sim embargo no puede dejar a un lado el tema de la delimitacion ya que el respeto a nuestra soberania es un principio constitucional y por ende estamos en el total derecho de velar por el resguardo y la soberania de nuestro territorio
Otra de las acciones mas importantes que considero seria eficiente para Venezuela debe establecer una política exterior de fronteras (por lo menos en la delimitación marítima) ya que este nos brindaria los medios que se van a utilizar para resolver la controversias, y los métodos a aplicar para delimitar la frontera. En cuanto a los primeros, la negociación se debe perfilar como una herramienta eficaz para resolver los problemas, nuestra República siempre ha privilegiado y aducido los métodos justos y equitativos, siendo un ejemplo de ello en el área en cuestión, la delimitación con los Estados Unidos de América (1978), con las Antillas Neerlandesas (1978), con Francia (1980), y más recientemente con la República de Trinidad y Tobago (1990).Cabe destacar que la proyección hacia el Caribe, y la garantía de una zona marítima exclusiva deben ser acordes con la costa venezolana y con el peso continental e insular de Venezuela, con lo cual no se puede decir hasta donde llega o no llega (dependerá del método que se emplee), pero con la garantía de que esa zona marítima exclusiva sea acorde con la importancia continental e insular. Vale la pena referirse a que, con relación a las delimitaciones de áreas marinas y submarinas pendientes con el Caribe insular, la posición venezolana, como en las anteriores delimitaciones, es la de buscar una negociación equitativa y bilateral con Dominica, Granada, Santa Lucía y San Vicente.
Bibliografìa:
BOESNER, Demetrio. Venezuela y el Caribe: Presencia Cambiante, Caracas: Monte
Ávila Editores, 1978.
CARDOZO DE DA SILVA, Elsa. “La Política Exterior de Venezuela 1984-1989:entre laVulnerabilidades Económicas y los Compromisos políticos”
FELICES PASCUAS COMPAÑERITOSSS!!!!
Dominica, Granada, San Vicente y Santa Lucia
Considerando nuestras pasadas experiencias en materia de fronteras, la oportunidad de delimitar con las islas del Caribe, con la cuales aun no se ha delimitado Dominica, Granada, San Vicente, Santa Lucia, San. Kitts-Nevis y Monserrat debe ser prioridad para el Estado, ya que estas negociaciones se dan en el marco del derecho marítimo, si se quiere en comparación con otras ramas del derecho, un derecho joven en la que aun en la actualidad cada conferencia sobre derechos del mar genera un nuevo marco jurídico. Esta por demás decir la importancia que esta área tiene, en la actualidad la soberanía marítima tiene un carácter vital para el ámbito comercial de un país, más allá de eso las áreas submarinas poseen un inmenso potencial económico en lo que respecta a recursos naturales y energéticos y es natural que los intereses de muchos actores se hagan presente como en tantas otras ocasiones y en tantas partes del mundo. Antes de proseguir con mi opinión con respecto a lo que sería la mejor vía de negociación hare referencia algunos tratados en esta área en los cuales el estado debe basarse para realizar las negociaciones.
• Tratado de Delimitación entre la República de Venezuela y el Reino de los Países Bajos de 1978 ( limitación bajo el concepto de línea media Reconocimiento de isla de aves como isla)
• Tratado de delimitación entre los Estados Unidos de América y la República de Venezuela 1978 (se reconoce la posesión de Venezuela sobre la isla de aves así como el reconocimiento de esta como isla)
• Tratado de delimitación entre la República de Venezuela y La República Francesa 1980 (limitación con dependencias francesas, bajo la base de la isla de aves)
• Tratado de delimitación entre la república de Venezuela y Trinidad y Tobago 1990 ( se establecen limites marítimos así como otros acuerdos de tipo económico, uno de los aspectos innovadores en prueba de la buena fe y capacidad de negociación es la unificación de yacimientos)
Una de las prioridades en las negociaciones que sostiene Venezuela con estos países es la defensa del principio, de que la isla de aves sea ratificada bajo el concepto de isla, punto que ha sido expresamente negado por estos países ya que de reconocer isla de aves como una isla generaria derechos marítimos que atentan contra sus intereses. Es importante destacar la posición que han jugado estos países al negociar con Venezuela como bloque, en el marco del CARICOM (comunidad del Caribe) lo que ha dificultado las negociaciones para Venezuela al sostener varios países una misma posición, lo más recomendable cosa que ha sido norte en las negociaciones con estos países es la de negociar bilateralmente, sin embargo la respuesta ha sido una contundente negativa, así que propongo que se redirijan las negociaciones en el marco de Petrocaribe organismo en el cual tanto Venezuela como estos países son integrantes y que tiene carácter económico energético pero que puede usarse como incentivo a las negociaciones con proposiciones como la unificación de yacimientos submarinos en materia energética (acuerdo que se ha firmado con Trinidad y Tobago) todo esto con el fin de llevar las negociaciones a un terreno mas favorable.
Bibliografía
- MORALES, Isidro, La delimitación de áreas marinas y submarinas al norte de Venezuela, Academia de Ciencias Políticas y Sociales, 1983.
MÉNDEZ, Tahio, La unificación de yacimientos aspectos generales, Asociación Venezolana de Procesadores de Gas, 2006.
Luis Ricardo Hornung ci 18231891
Moisés Chocrón
C.I. 18.094.581
Hola Compañeros.
Opino que para delimitar el espacio marítimo y submarino con las Antillas Menores restantes, que no se han delimitado con Francia, debemos en primer lugar tener dos objetivos claves: el primero, velar porque el acuerdo tenga equidad entre el espacio marino de Venezuela y las Antillas Menores, para que además de ser un acuerdo justo, nos ofrezca la oportunidad de negociar con estas Antillas el libre tránsito al Océano Atlántico, ya que por la condición de Mar semi-cerrado que tiene el Mar Caribe el tránsito comercial por estas aguas es casi indispensable.
El segundo objetivo sería que la negociación de áreas marinas y submarinas no debe ceder a las Antillas un espacio mayor a un azimut en el extremo más oriental del Estado Sucre (Macuro) con dirección a la Isla de Aves, para que así se proyectase la costa venezolana en el Mar Caribe sin mayor problema manteniendo el dominio del área marina que nos permita ejercer la soberanía sobre la Isla de Aves.
El primer punto se apoya en el Tratado firmado por Venezuela y los Países Bajos de 1978 con respecto a las islas Aruba, Curazao y Bonaire, donde Venezuela conserva la posibilidad de tránsito comercial marítimo y aéreo. Mientras que el segundo punto se sustenta sólo en la necesidad estratégica que tiene Venezuela en la Isla de Aves.
Desde mi punto de vista Venezuela debe ser incluso permisiva en esta negociación ya que como país petrolero nos es de gran importancia una salida sin problemas al Océano Atlántico para facilitar así la distribución del crudo a Europa y otras partes del mundo y también importar sin mayores contratiempos todos los productos que son necesarios para la nación.
Me despido cordialmente...
Moisés Chocrón Feliz Navidad!
Bibliografía utilizada:
- La Delimitación de áreas Marinas y submarinas al norte de Venezuela. Isidro Morales Paúl. De la Academia de Ciencias Políticas y Sociales.
- Geografía de América. Tomo I. Ediciones Océanos.
- Enciclopedia Océano de Venezuela. Tomo I. Ediciones Océanos.
Líneas de acción a seguir con respecto a las delimitaciones de Venezuela con el Caribe:
Primeramente es importante saber que la fachada Marítima de Venezuela es de 2.718 Km., en tanto que el frente Atlántico es de 1.006 Km., sin contar los 280 Km. de la Zona en reaclamación. Así mismo, se mencionan las 3 recomendaciones a la delimitacion de áreas marinas y submarinas con países e islas del Caribe:
- Apertura de negociaciones para generar fronteras: estas delimitaciones deben ser de carácter bilateral, con los países del Caribe, y no a través de arbitraje o de manera unilateral, a fin de mantener buenas relaciones políticas con cada uno de los estados. Si bien ya se ha realizado la delimitaciones con las Antillas Neerlandesas (1978), con Trinidad (1990), con EEUU (1978) y con Francia (1980), debemos prever con las restantes la delimitaciones generar espacios abiertos, a la hora de generar fronteras, ya que no poseemos espacios abiertos donde logremos tener 200 millas náuticas.
- Venezuela debe trabajar sobre la base de equidad: las negociaciones, soluciones, propuestas que se lleven a cabo deben conducirse equitativamente. Incluso el principio de equidad debe consagrarse como norma orientadora en la cuestiones de delimitaciones. Actuar de manera contraria seria ir de espalda a lo que se estipula como los principios de solidaridad e integración entre las naciones hermanas, especialmente en el bloque Latinoamericano y del Caribe, que actualmente guían la política exterior de nuestro país.
- Proyección de bloques de integración, cooperación e intercambio: Venezuela en los últimos años ha tenido un importante papel en la consolidación de bloques regionales, comerciales y de integración en Latinoamérica. Para la solución, en relación al tema de delimitacion de Venezuela con el Caribe, se debe tomar en cuenta la posición favorable que actualmente tenemos a nivel internacional, a fin de afianzar nuestras relaciones con los países del Caribe que no han firmado con nosotros delimitaciones de fronteras. (Venezuela actualmente es miembro observador de CARICOM). Así mismo, en la búsqueda de afianzar y mantener esas buenas relaciones tendría que estudiarse la oportunidad de que Venezuela proponga la entrada de los países del Caribe a los bloques de Integración como el ALBA (liderizado por Venezuela y Cuba), UNASUR y comerciales como PETROCARIBE
Alejandra Zerpa
CI. 18.275.507
Oswaldo R. Rodríguez R.
C.I.: 16.204.846
Venezuela ha delimitado sus áreas marinas y submarinas en 70% aproximadamente, lo que representa una superficie de unos 560.000 km2 de zona económica exclusiva, esas delimitaciones se realizaron con: Los Estados Unidos de América (Puerto Rico e Islas Vírgenes), Reino de Los Países Bajos (Aruba, Curazao, Bonaire, Saba y San Eustaquio), República Dominicana, República Francesa (Martinica y Guadalupe) y con La República de Trinidad y Tobago. Están pendientes por delimitar áreas marinas y submarinas en el Caribe oriental, con las siguientes islas: Grenada, San Vicente y Las Granadinas, Santa Lucía, Dominica, Monserrat (Colonia del Reino Unido) y St. Kitts-Nevis.
La delimitación de áreas marinas y submarinas de Venezuela con los países del Caribe ha sido objeto de controversia a nivel internacional, debido a que nuestro país no ratificó La Convención sobre el Derecho del Mar de 1982, porque en este se establecieron ciertos parámetros que se encuentran en contradicción con el ejercicio de nuestra soberanía, como es el caso del artículo 121 de dicha Convención donde se establece lo relativo al régimen de las islas, de la siguiente manera: “ARTÍCULO 121.- Régimen de las Islas: 1) Una isla es una extensión natural de tierra, rodeada de agua, que se encuentra sobre el nivel de ésta en pleamar. 2) Salvo lo dispuesto en el parágrafo 3, el mar territorial, la zona contigua, la zona económica exclusiva y la plataforma continental de una isla serán determinados de conformidad con las disposiciones de esta convención aplicables a otras extensiones terrestres. 3) Las rocas no aptas para mantener habitación humana o vida económica propia no tendrán zona económica exclusiva ni plataforma continental.”
La importancia de este territorio insular de 500 metros de largo y de 20 a 40 metros de ancho aproximadamente con una altura superior a los 4,5 metros sobre el nivel del mar, cuando la marea esta baja, se debe a que constituye el punto territorial a partir del cual Venezuela debería ejercer la negociación limítrofe con cuatro estados vecinos: Dominica, St. Kitts-Nevis, Monserrat y Santa Lucía, quienes sostienen que la Isla de Aves no es tal, sino un islote o roca, que agrega a la Zona Económica Exclusiva de Venezuela, aproximadamente, 75.000 kilómetros2, en perjuicio de su propia Zona Económica Exclusiva. Esto conforme a lo ya mencionado de la Convención sobre el Derecho del Mar de 1982. Sin embargo cabe destacar que, Isla de Aves ha sido aceptada como punto de referencia en los tratados de delimitación de áreas marinas y submarinas anteriormente mencionados.
Con respecto a las líneas que debería seguir Venezuela para lograr delimitar las áreas marinas y submarinas con las islas del Caribe Oriental, deben estar las siguientes:
“Un paso indispensable para el adecuado posicionamiento de Venezuela en función de las delimitaciones pendientes es decretar las líneas de base recta en la costa y en las islas, para asimilarlas al territorio continental y por tanto al mar territorial y zona contigua.” (Feijoo Colomine Rincones, IMPORTANCIA GEOESTRATÉGICA DE LAS DEPENDENCIAS FEDERALES E ISLA DE AVES, página 66)(En: Aldea Mundo, año 5 no. 9). Con esto se lograría generar efectos directos sobre ese territorio y los recursos que allí se encuentren.
Venezuela debe adoptar una política exterior de Estado, en el cual su estrategia diplomática (en cuanto al tema en cuestión) esté dirigida a la negociación bilateral con cada una de las islas con que se debe delimitar, ya que no le es favorable negociar con ellas en bloque, como ha sido la propuesta de Las islas del Caribe Oriental -Dominica, Antigua y Santa Lucía-, que mantienen cuestionan el hecho de que la Isla de Aves genere plataforma continental y zona económica exclusiva. La Organización de Países del Caribe Oriental manifestó en la Cumbre del Caricom del 2001 que exhortaba a dicha organización a que asumiera posición en el tema y se solidarizara con sus puntos de vista, posteriormente la Comunidad del Caribe (CARICOM) emitió un comunicado final en el cual respaldó a la Organización de Estados del Caribe Oriental planteando que se delimite con Venezuela en conjunto y no individualmente, como había ocurrido hasta ahora. Por lo que sería necesario que Venezuela se acerque políticamente hacia aquellos países del Caribe con los que tiene buenas relaciones y profundizarlas de forma bilateral para tratar de equilibrar la balanza a su favor y consiga cierto respaldo en cuanto al tema de la delimitación dentro del ámbito multilateral, aunque esto sea solo para intentar mantener ese tópico fuera de la agenda multilateral. Además de ello, sería de suma importancia que al establecerse las negociaciones al respecto se incluyan fórmulas cooperativas para de esa manera lograr persuadir a la contraparte a que acepte o flexibilice su posición firme en aquéllos puntos donde sea perjudicial para los intereses de Venezuela.
Finalmente podemos concluir que las delimitaciones pendientes en el Caribe Oriental no deben basarse solo en la titularidad histórica, en el futuro, “alguien podría considerar esos espacios delimitados por Venezuela y que tienen precedente jurídico, como espacios abiertos a la administración de los recursos de alta mar, carentes de cualidad jurídica para generar plataforma continental. El conflicto diplomático planteado por Dominica y Monserrate, en julio de 2001, con el respaldo de la mayoría de los países del CARICOM, constituye un alerta al respecto.” (Feijoo Colomine Rincones, IMPORTANCIA GEOESTRATÉGICA DE LAS DEPENDENCIAS FEDERALES E ISLA DE AVES, página 72)(En: Aldea Mundo, año 5 no. 9).
El Mar Caribe siempre ha sido un lugar de alto conflicto en materia limitrofe, principalmete por su doble caracteristica de ser un mar casi cerrado, muy parecido al Mar Mediterraneo, y ademas por ser un mar central entre las dos masas continentales de América del Norte y América del Sur.
Existen varias recomendaciones para poder establecer un acuerdo de beneficio para los involucrados en el caso de la delimitacion de Venezuela con los paises en el Caribe.
La primera recomendación es la creacion de una Comision que revise los hechos por los cuales ha pasado el proceso de la delimitacion, para poder determinar el correcto hilo de la historia donde se pueda demostrar los logros de Venezuela, tales como la delimitación con Estados Unidos de Norteamérica y las Antillas Neerlandesas en 1978, con Francia en 1980 y Trinidad y Tobago en 1990.
Seguido de esto se deberia crear de un Comision Mixta de Demarcacion para la delimitacion de las areas marinas y submarinas de Venezuela con los paises caribenos con los cuales tenga conflicto en esta materia. Paises tales como Granada, Dominica, San Vicente y Santa Lucia. Esto es para poder establecer el area de reclamacion por cada parte, una recomendación muy pertienente ya que esto estableceria la base para poder sentarse a discutir el proceso de delimitacion.
Para Venezuela es un espacio geografico de suma importancia y queda reflejado en que es utilizado para la transportación del 98% de sus exportaciones y el 95% de sus importaciones. Ademas existe la explotación comercial de la ictiofauna marina y de los bosques de mangle y la explotación de los hidrocarburos subyacentes en la Zona Económica Exclusiva, mediante la instalación de plataformas de perforación y distribución de productos derivados.
Al lograrse un acuerdo bilateral entre cada uno de los Estados del Caribe con Venezuela en materia de la delimitacion se deben tomar en cuenta otras recomendaciones. Establecer en conjunto con los paises caribeños un fortalecimiento de la defensa y seguridad de las flotas para controlar la navegacion y los recursos. Es tambien necesario la instalacion de sistemas científicos de observación, estudio, vigilancia y control de los ecosistemas costeros y marítimos. Al igual que el desarrollo de una infraestructura de servicios para el turismo, en adecuado aprovechamiento de los distintos escenarios marítimos.
Referencia:
TORREALBA, Alfredo. Áreas de interés de Venezuela en el Caribe: el conflicto de Isla de Aves y Archipiélago Los Testigos y la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar de 1982. [En Línea]. [Consulta: 15 de diciembre de 2008]. Disponible en: http://www.debatecultural.net/Nacionales/AlfredoTorrealba5.htm
Carlos Coll
C.I. 14300603
Sugerencias al tema de la delimitación de aguas marinas y submarinas con los Estados del Mar Caribe
El establecer un esquema definitivo de delimitación de las áreas marinas y submarinas con las naciones del frente oriental del Mar Caribe constituye un tema que debe ocupar un lugar relevante en las relaciones exteriores de Venezuela, puesto que resulta imprescindible la fijación de límites verdaderos para que el país ejerza soberanía plena y ponga en marcha planes de desarrollo que también abarquen a estas zonas geográficas. De allí que este asunto sea prioritario debido a su elevado interés para el país, en vista de que Venezuela no ha demarcado las fronteras con varios de sus vecinos caribeños como lo son: Dominica, Granada, San Cristóbal y Nieves, San Vicente y las Granadinas junto con la isla de Montserrat (actualmente bajo dominio de Gran Bretaña). No debe dejarse a un lado la importancia económica de la zona producto de la gran potencialidad en recursos naturales lo que podría significar importantes beneficios.
Hay que resaltar que la situación de las islas en el Caribe evitan que Venezuela tenga una salida marina expedita hacia el resto del mundo por lo que deben prevalecer las relaciones armoniosas sin elementos que puedan perturbar el mantenimiento de éstas, es por ello que la fijación plena de los límites marinos y submarinos son un factor que contribuyen decididamente a la consecución de dicha armonía. Para ello nuestro país ha realizado negociaciones limítrofes exitosas mediante convenios con el Reino de los Países Bajos (Aruba, Curazao y Bonaire) y Estados Unidos (Puerto Rico e Islas Vírgenes) en 1978, República Dominicana, Francia (Guadalupe y Martinica) en 1980 y Trinidad y Tobago, los cuales han sido beneficiosos por las partes involucradas pues han dado pie a acercamientos con miras al incremento del intercambio comercial y de las relaciones diplomáticas.
Dada la situación actual se hace imprescindible la formulación de algunas sugerencias que allanen el camino para lograr que demarcación limítrofe con las naciones del Caribe oriental se efectúe de forma exitosa:
-La nación debe implementar la negociación bilateral directa como el mecanismo idóneo para resolver las disputar por límites marinos con sus vecinos del Caribe, pues el mismo constituye un medio pacífico de resolución de controversias y brinda la oportunidad de que las partes muestran sus verdaderos intereses. Para ello las diversas negociaciones deben efectuarse de forma secreta para evitar que agentes exógenos entorpezcan las discusiones y las retarden en el tiempo.
- Venezuela debe implementar las medidas necesarias para evitar la posibilidad de que la Isla de Aves desaparezca por efecto de los cambios naturales que ha sufrido en vista de que si esto sucede se perdería una considerable cantidad de superficie marina proporcionada por ella.
- El país debe Venezuela debe fijar limites con los Estados del Caribe de forma bilateral con la finalidad de que pueda imponer sus ventajas territoriales y marinas con mayor facilidad que las que podrían dar esos Estados si estuvieran negociando en bloque, puesto que así ellos podrían obtener mayor cantidad de Zona Económica Exclusiva. Es por ello que no deben seguirse los planteamientos hechos por la Organización de Estados del Caribe Oriental que es partidaria de la negociación en bloque con Venezuela, pero luego de que resuelvan entre sus miembros sus respectivas disputas limítrofes, provocando que el retardo del tratamiento de este primordial asunto.
-Es necesario que la República mantenga e incluso fortalezca las relaciones de cooperación e intercambio con aquellas naciones caribeñas con las cuales no se han fijado límites por medio del CARICOM a pesar de que varios de sus miembros no están de acuerdo con que Venezuela ocupe la isla de Aves y vean con recelo la disputa limítrofe que nuestro país sostiene con Guyana (miembro de la Comunidad) al alegar pretensiones hegemónicas por parte de nuestra nación. Sin embargo esquemas como PETROCARIBE podrían ablandar esas posiciones por ser mecanismos de integración.
- También es importante reforzar la presencia venezolana en las aguas e islas para darle mayor dominio efectivo a la zona y, además, impedir actividades de carácter ilícito como contrabando, narcotráfico, etc. para evitar que otros países argumenten que nuestro país es incapaz de hacerse cargo de esos lugares. Además, con esta medida se evitarían acontecimientos como el ocurrido meses atrás cuando el gobierno de Barbados intentó dar concesiones para la exploración de hidrocarburos a empresas extranjeras en aguas cuyo dominio ha sido reivindicado por Venezuela. No obstante, la creación de comisiones técnicas encargadas de velar por la posesión del territorio nacional significaría un gran apoyo.
-Las comisiones técnicas a las que se hizo referencia en el párrafo anterior pudieran encargarse de determinar qué tipo de recursos naturales se encuentran en la zona del mar Caribe y sus potenciales beneficios económicos para el país a fin de explotarlos con rapidez.
-Es muy importante que la República haga valer la condición jurídica de isla que posee nuestra Isla de Aves en las negociaciones que haga con los Estados del Caribe, pues como tal la han reconocido Estados Unidos, El Reino de los Países Bajos y Francia en las respectivas negociaciones limítrofes que con ellos se han mantenido, además de su reconocimiento hacia la soberanía que nuestro país ejerce sobre dicha isla. Esto evitaría que se produzcan situaciones como la ocurrida en el año 2001, cuando en la cumbre de la CARICOM, Dominica (apoyado por los gobiernos de Barbados, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, y San Vicente y las Granadinas)
denunció la ocupación de la Isla de Aves por parte de Venezuela, lo cual se sobreentendió como que Dominica reclama la isla como suya. Debe mencionarse que estos países son integrantes de la Organización de Estados del Caribe Oriental, quienes en diversos documentos se refieren a la Isla de Aves como una roca y se niegan a reconocer los derechos en zona económica exclusiva y plataforma continental que tiene por ser una isla. Así instan a Venezuela a suspender actividades tendientes a reafirmar el carácter de isla de dicha posesión, a saber: bautizos, matrimonios e investigaciones científicas, etc. las cuales por demás son totalmente validas puesto que las leyes favorecen a nuestro país respecto de la legitimidad que representa el hacer las actividades que considere necesarias dentro de sus dominios.
-En el caso de la negociación con Granada, el tema de la delimitación debe hacerse desde la posesión de Los Testigos y luego considerarse si se toma la línea media o la disparidad superficial de las islas para definir los limites, esto como parte del principio de equidad del cual ha sido parte Venezuela.
-Para concluir la República Bolivariana de Venezuela, durante los procesos de negociación debería firmar acuerdos como los hechos con Trinidad y Tobago a fin de que ambas partes puedan obtener de manera equitativa los beneficios de los recursos naturales situados en las zonas en delimitación con lo cual estén representados los diversos intereses en la proporción justa.
Las anteriores tan solo constituyen algunas sugerencias que muy bien podrían contribuir al logro efectivo y pacífico de la resolución de las variadas divergencias limítrofes de las áreas marinas y submarinas que aún restan por despejar a nuestro país si quiere dar marcha a una política exterior de complementariedad plena con las naciones del mar Caribe, pues si bien en la actualidad ha conseguido estrechar las relaciones con esos Estados, seguramente la resolución del aspecto limítrofe ayudaría de gran modo a un mejor acercamiento en el futuro entre todos los actores.
Franklin J. Cabello G.
18.577.602
La Diplomacia venezolana en el Caribe debe tener un enfoque cooperativista e integracionista y respetuoso, pero la realidad ha establecido ciertas discordias y acciones pocos cordiales que han matizado las relaciones en la región. Pero, por otro lado, a la fecha, se han logrado delimitar un 70% de las fronteras marítimas gracias a que se han suscrito cinco tratados de delimitación con igual numero de países (Estados Unidos de América, Reino de los Países Bajos, República Dominicana, República Francesa, Reino Unido y Trinidad-Tobago) mediante certeras políticas de negociación y entendimiento.
Venezuela también tiene otras delimitaciones de áreas marinas y submarinas pendientes en el caribe insular, pero la búsqueda de negociaciones ecuánimes y bilaterales han quedado detenidas porque no se ha podido solventar el tema de la jurisdicción marítima de Isla de Aves con nuestros vecinos anglo caribeños del caribe oriental, como punto de partida primordial para definir la delimitaciones en espera.
Para lograr soluciones acertadas ante estas divergencias fronterizas entre los estados caribeños y Venezuela:
• Que sea una negociación políticamente aceptable respaldada por lo menos, por la mayoría determinante de sectores representativos de ambos sectores tanto Venezuela como el caribe.
• Venezuela debe tener una relación comercial mas Dinámica en el comercio y actividades culturales con los países caribeños y sobre todo en lo que respecta a las relaciones de Venezuela con Dominica y otros países caribeños ya que existe una reclamación territorial aún sin resolver y, la cual, trata sobre la posición de estos Estados insulares quienes niegan que la Isla de Aves genere jurisdicción marítima.
• Venezuela debe seguir una política exterior de Estado con relación al respeto de su soberanía sobre Isla de Aves, sin embargo, esto no querrá decir que el país debe alejarse de las mesas de negociaciones con estos países ya que esto deterioraría la dinámica armónica que siempre ha mantenido en la región.
• Venezuela deberá hacer nuevos proyectos a la hora de ejercer contactos diplomáticos con los paises caribeños, ya que la novedosa postura de esta organización demanda de nuestro país un cambio de idea en la manera de cómo se han comprendido las relaciones diplomáticas en la región.
• Venezuela debe profundizar sus nexos con cada uno de los países que integran CARICOM, tanto multilateralmente como bilateralmente en el plano energético
• Que sea una negociación viable prácticamente, que no implique la violavilidad del espacio de un Estado en cual ambas partes en cuestión ganen por igual.
• Venezuela debe tratar de utilizar el mecanismo de negociación directa para la búsqueda de una solución racional, justa y nivelada
• Debe existir una comisión promovida por ambas partes tanto Venezuela como algunos paises del caribe en la cual existen problemas limítrofes para la demarcación y acaten la sentencia establecida por la comisión limítrofe para establecer los puntos de partida que ellos crean pertinententes. Y el cual deba existir si es requerido la equidad.
Leonardo Pineda F.
16.970.315
Mariana Pnatoja
C.I: 16.284.096
Venezuela en su frente norte caribeño posee una serie de territorios insulares: archipiélago de los monjes, archipiélago las aves, archipiélago los Roques, isla la Orchila, isla aves, entre otras, que generan unos derechos sobre áreas marinas y submarinas. De manera que se han establecido líneas limítrofes con Colombia; República Dominicana; Estados Unidos a través de Puerto Rico y Santa Cruz; los Países Bajos a través de Aruba, Curazao y Bonaire, además de Saba, San Eustaquio y San Martín; también con una serie de Islas Caribeñas Orientales. Algunas de estas delimitaciones no están resueltas.
Venezuela debe en primer término defender sus espacios insulares fomentando su desarrollo y su protección como ambiente particular, y acumular información verificable sobre sus potencialidades. Además de manejar toda la información histórica.
En relación a algunas islas caribeñas orientales: Dominica, Granada, Saint Kitts y Nevis, Barbados, Santa Lucía, San Vicente y Granadinas, y la colonia británica de Montserrat, las líneas limítrofes no han sido establecidas en su totalidad.
A continuación algunos tratados firmados por Venezuela para resolver problemas limítrofes en el Caribe:
° Tratado de delimitación entre los Estados Unidos de América y la República de Venezuela 1978. Este tratado tiene mucho interés para Venezuela, ya que Isla de Aves es reconocida en su condición de Isla, debido a que actualmente ha sido puesto en entredicho su condición, porque se aduce perdida de territorio.
° Tratado de Delimitación entre la República de Venezuela y el Reino de los Países Bajos de 1978. Al igual que el anterior, reconoce la condición de la Isla de Aves.
° Tratado de delimitación entre la República de Venezuela y La República Francesa 1980.
° Tratado de delimitación entre la república de Venezuela y Trinidad y Tobago 1990.
Todos estos tratados han sido bilaterales, de manera que se evidencia la participación de cada país en la negociación y esta parece ser la forma más adecuada de manejar los asuntos fronterizos en la zona del Caribe.
La nación debe estar alerta en cuanto al territorio de la Isla de Aves, porque esta ha perdido espacio físico por fenómenos naturales y debe preservar su categoría de isla y mantener la defensa y seguridad ante otras naciones, para así evitar actividades que perjudiquen la zona.
Los problemas limítrofes deben ser muy bien estudiados y deben tener el asesoramiento de grupos de expertos, tanto en Derecho del Mar, como en las relaciones diplomáticas con los vecinos, además de historiadores y también científicos que hagan comprender el potencial de ese recurso. Por ejemplo: el incidente suscitado con Barbados, en el año en curso, cuando su gobierno entregó licencias de exploración de hidrocarburos a empresas extranjeras en aguas que son reivindicadas como venezolanas, demuestra que se debe trabajar en una relación diplomática más estrecha, que defienda los intereses de cada país sin perjudicarse mutuamente.
Referencias:
°MORALES PAUL, Isidro.(1983). “La Delimitación de Áreas Marinas y Submarinas al Norte de Venezuela”. Caracas: Academia de Ciencias Políticas y Sociales.
°Convención de Naciones Unidas Sobre el Derecho Del Mar. 1982.
°BOESNER, Demetrio. Venezuela y el Caribe: Presencia Cambiante, Caracas: Monte
Ávila Editores, 1978.
Mariana Pantoja
C.I: 16.284.096
FELIZ NAVIDAD Y QUE ESTE NUEVO AÑO ESTE LLENO DE MUCHAS FELICIDADES PARA TODOS!!!!!
En mi opinión, deberíamos comenzar, el presente análisis de investigación documental analizando el hecho de que Venezuela y la mayoría de los países del caribe oriental siempre han tenido una relación comercial pro-activa en el plano comercial y cultural a lo largo del tiempo.
Poniendo como ejemplo de lo antes expuesto las relaciones de Venezuela con Dominica, Granada, Santa Lucía y San Vicente, Sn. Kitts-Nevis Monserrat ya que existe una reclamación territorial aún sin resolver y, la cual, trata sobre la posición de estos Estados insulares quienes niegan a la Isla de Aves (Venezuela) cómo creador de jurisdicción marítima.
Nuestro hermoso país ha puesto de manifiesto su opinión de que Isla de Aves es un islote perteneciente a su territorio y por tanto creador de jurisdicción marítima, en cambio, Dominica, Granada, Santa Lucía y San Vicente, contradicen tal tesis al afirmar que Isla de Aves no es una isla y por defecto no crea jurisdicción según lo estipula el Artículo 121 de la Convención del Derecho del Mar de 1982.
Venezuela desea y precisa aclarar este escenario a través de sus relaciones diplomáticas, no obstante la situación se ha vuelto un poco más compleja y dificultosa debido a que los éstos Estados insulares, después de la creación de la OECO, han preferido discutir la situación de Isla de Aves como grupo asociado y no independientemente.
En vista de que las posición de los Estados insulares del Caribe Oriental se ha desarrollado más, ahora, que proceden como grupo a través de la OECO, será recomendable que Venezuela mantenga una política exterior de Estado con respecto al respeto de su soberanía sobre Isla de Aves, sin embargo, esto no querrá decir que el país debe alejarse de las mesas de negociaciones con estos países ya que esto deterioraría la dinámica armónica que siempre ha mantenido en la región.
Fuente: http://www.debatecultural.net/Nacionales/AlfredoTorrealba5.htm
Lo antes expuesto se fundamenta también en lo que nos expicó el Dr. Enrique Planchard ,ayer en la Cancillería, a mis compañeras Carhil A, Martínez Marrero, Daniela A. Rodíguez Martínez, Nelly Mogollón y Verónica La Maida. El Dr Enrique Planhard Propone :las delimitaciones del Caribe, debido a que tenemos todo el tiempo, porque existe un tratamiento.
Mis Propuestas para el Caribe son:
• Para el Caribe la Delimitación misma.
• Vias de Comunicación
• Turismo
• Conservación del Ambiente
• Intercambios Estudiantiles.
FELIZ NAVIDAD Y PRÓSPERO AÑO 2009.
La queremos profesora.
Dios los bendiga.
Una estrategia para Venezuela en el Caribe.
Cuando abordamos el estudio de las zonas limítrofes de Venezuela en el Caribe, el elemento que sale inmediatamente a relucir y que merece especial atención es el caso de la Isla de Aves, pequeño islote coralino cubierto de arena que se encuentran a unos 560 km de la costa continental del país y que solo ocupa una extensión de 1.000x400m.
Decimos que merece especial atención, porque ha sido la causa de una continua disputa entre Venezuela y un conjunto de países caribeños (St. Kitts-Nevis, Dominica, Santa Lucía, San Vicente, Granada y Monserrat) durante varios años. Ellos sostienen, de acuerdo a la Convención de Derecho del Mar de Montego Bay, que este pequeño islote no es más que una “roca” que carece del valor jurídico para generar la zona de uso económica exclusiva de 95.000 km2 con la cual actualmente cuenta, en perjuicio de sus intereses.
Hablamos sólo de este caso, pues los límites con países como Estados Unidos, Países Bajos, República Dominicana, República Francesa y Trinidad-Tobago, ya han sido previamente negociados. El resultado de estos acuerdos, asciende al 70% de las fronteras marítimas que posee hoy día Venezuela.
No obstante, con respecto a Isla de Aves y también al Archipiélago Los Testigos, la situación es diametralmente diferente. No sólo por los descontentos que han causado con los países caribeños anteriormente mencionados, sino porque la situación ha llegado a instancias multilaterales como la Comunidad del Caribe (conocida como CARICOM) y la Organización de Estados del Caribe Oriental (OECO), quienes apoyan la posición del desconocimiento de la soberanía venezolana sobre ese territorio.
Eso, aunado con la no firma ni ratificación de la Convención de 1982 por parte de nuestro país, hace del presente escenario un gran reto para Venezuela. Es al mismo tiempo, necesario de resolver, en tanto se encuentran en juego miles y miles de recursos naturales aprovechables por cualquier Estado que los administre.
Es pertinente rescatar que a la luz de estos conflictos, suscitados también en otras partes del mundo, han surgido interesantes alternativas dignas de ser citadas. Por ejemplo, “el concepto del ′mar matrimonial′ que, en contraposición al ′mar patrimonial′, designa un Mar Caribe de uso común y abierto a todos los colindantes” (Rattery et al., 1973, Fonteyene, 1976). Sin embargo, este tipo de iniciativas han sido categóricamente rechazadas por los Estados debido a todas las consecuencias económicas y de seguridad que ello conlleva, prevaleciendo así el principio de la propiedad nacional.
Ante tal panorama, y en el intento de diseñar una política coherente en aras de defender los intereses del Estado venezolano, la estrategia más conveniente a seguir es la solución del problema por vía bilateral, tal como se ha hecho en otras ocasiones. La negociación debe establecerse enteramente por este medio y no a través de un arbitraje o en el marco multilateral, ya que privilegia los intereses de las partes sin intervención de terceros. Ello es aún más conveniente, cuando existe ahora un lineamiento único y en bloque por parte de los organismos caribeños que van en perjuicio de la postura nacional.
Venezuela puede, por ejemplo, negociar la explotación equitativa de los recursos marinos y submarinos, aumentar su presencia en la zona (cabe destacar que en 2001 el Presidente ya había anunciado la creación de una base militar en la Isla de Aves) y mejorar la vigilancia de toda el área marítima.
Todo lo anterior, a la par de un mayor acercamiento económico y político a los países con los cuales se encuentra en disputa limítrofe, facilitará la concreción de acuerdos de orden bilateral que permitan el definitivo reconocimiento de la soberanía del Estado venezolano en la zona.
Asdrúbal Santana
C.I. 18.751.632.
Vanesa Yañez
C.I. 18.111.857
Venezuela, como Estado ubicado al norte del continente Suramericano, debe con suma urgencia delimitar su territorio con los países insulares fronterizos, esta necesidad surge por la localización estratégica del país, y por la importancia que tiene a nivel mundial el Mar Caribe. Como han explicado ya mis compañeros, Venezuela ha negociado en varias oportunidades la delimitación de sus fronteras, primero con los países europeos colonizadores en este continente (Holanda, Gran Bretaña) y luego con los países directamente implicados, si bien algunos de los resultados de las negociaciones han sido efectivos, como las negociaciones realizadas con Estados Unidos de Norteamérica en 1978, no siempre ha sido así. A mi parecer el problema radica en la falta de una línea clara y constante que establezca las condiciones exigidas por Venezuela; ya que, cada vez que surgía un cambio de gobernante, también surgían nuevas reclamaciones, y las políticas de negociación cambiaban, dando como consecuencia la falta de una propuesta clara por parte de la República.
Sin embargo, y dado lo complicado de la asignación, yo considero que Venezuela debería evaluar las exigencias de cada territorio de forma individual, para poder establecer qué es lo que está dispuesta a negociar y lo que no puede por ningún concepto ceder.
En este sentido, estoy de acuerdo con el comentario de mi amiga Herminia, donde escribe que no es conveniente que los países del Caribe se agrupen en bloque, pues en ese caso Venezuela quedaría en desventaja.
Tampoco considero prudente que se busque una resolución por Arbitramento, pues dada la experiencia de Venezuela, sabemos que no es buena idea, pues la decisión final es tomada por un tercero al cual no le afectan las consecuencias que una mala delimitación pueda tener.
Entonces, opto por unas negociaciones directas, ayudado por condiciones de cooperación entre Estados, en busca de la procura de todos los países. Para lograr dicho propósito, Venezuela cuenta con modelos de integración como el Petrocaribe, Caricom; donde, aunque no sea un miembro activo con derecho a voz y voto en ambos, puede obtener apoyo técnico para buscar una solución pacifica a sus controversias; además contamos con grandes recursos energéticos con los que se puede negociar, para que todos los países implicados salgan beneficiados de forma equilibrada.
Bibliografía:
Instituto Geografico de Venezuela Simón Bolìvar. Los Espacios Marinos bajo soberanía y/o jirisdicción de Venezuela en el Caribe y en el Atlántico.
Morales Paul, Isidro: Delimitación Sobre Areas Marinas y Submarinas Al Norte de Venezuela. Caracas, Serie de Estudios.
Venezuela es un país ubicado geopolíticamente de manera estratégica al ser andino, amazónico, caribeño y atlántico. Siendo principalmente caribeño porque posee 4.006 km en extensión de costas marítimas y en mar caribe su fachada marítima alcanza los 2.710 km de largo, desde castilletes en la Península de la Guajira hasta Punta Peñas en el extremo este de la Península de Paria.
Dada esta realidad Venezuela tiene una amplia gama de Islas en el Caribe con las que colinda jurisdiccionalmente y con las que tiene que definir y delimitar de una manera clara y beneficiosa los dominios territoriales correspondientes a la nación y a cada país existente en el Caribe. Situación que aunada a la amplia fachada peninsular que posee Venezuela y que está conformada por los siguienes archipielagos: Los Monjes, Las Aves, Los Roques, La Orchila, Los Hermanos, Los Frailes y Los Testigos; además de las siguientes islas: La Tortuga, La Blanquilla, Isla de Margarita, Coche, Cubagua, La Sola, Isla de Patos, Isla de Aves, entre otras; complica y hace más delicada la cuestión de la delimitación.
Y es que Venezuela debe buscar, de la mayor manera posible, que estas delimitaciones se hagan antes de que pueda surgir alguna controversia al respecto, dado que paulatinamente se ha ido decubriendo un gran potencial energético en estas áreas. Dentro de estos espacios, Venezuela ya ha delimitado su área de aguas marinas y submarinas con Estados Unidos (1978), las Antillas Neerlandesas (1978), República Dominicana (1979), Francia (1980) y Trinidad y Tobago (1990). Si bien entre las delimitaciones de áreas marinas y submarinas que están pendientes falta la que se debe hacer con Colombia pero que no es pertinente desarrollar en este paper debido a que se profundizará en el área caribeña, en donde faltan por delimitar: Grenada, San Vicente y las Grenadinas, Santa Lucía, Dominica, Monserrat y St. Kitts-Nevis.
Dentro del panorama ya expuesto hay un factor muy importante a considerar y que lo representa la Isla de Aves. Esta Isla está ubicada 500 km al norte de la Isla de Margarita y da inmensos aportes a la República a nivel de aŕeas marinas y submarias, por lo que su pertenencia a Venezuela está siendo cuestionada de manera irreverente por varias islas del caribe oriental y con base a la Convención de Montego Bay sobre derechos del Mar. A continuación se explica como: Los Derechos de Venezuela sobre la Isla de Aves están claramente establecidos desde 1859, cuando el Ministerio de Relaciones Exteriores de Venezuela firmó un acuerdo de concesiones con una Compañia Estadounidense donde esta segunda le reconocía a Venezuela todos sus derechos y potestades tanto jurídicas como administrativas sobre esta isla. Y así quedó reseñado también en la delimitación de áreas marinas y submarinas en 1978 con los Estados Unidos (Puerto Rico y Santa Cruz), donde este último le reconocía a Venezuela todas las areas que emanaban del Archipielago La Orchila, Los Roques e Isla de Aves.
Pero una vez llevada a cabo la Segunda Convención sobre los Derechos del Mar, en Montego Bay (1982), Convención que Venezuela no solo no firmó sino que votó en su contra, surgieron varias incertidumbres producto de la definición del término Isla. Esta convención en su artículo 121 establece que una isla es una extensión natural de tierra rodeada de agua que se encuentra sobre el nivel de esta en pléamar y que debe ser apta para albergar en sí habitación humana o vida económica propia, y la Isla de Aves no posee ninguna de estas últimas dos caracterizaciones, por lo que muchos países sostienen que Venezuela no debe exigir ni mar territorial, ni zona contigua, ni plataforma continental, ni zona económica exclusova, tal como lo establece el mismo artículo de la citada convención.
Entonces acá podemos ver el principal inconveniente que existe en este proceso de delimitación para lo que Venezuela, en primer lugar debe asegurar esto como parte de la negociación y buscar un acuerdo con las partes al respecto, basado principalmente en los antecedentes jurídicos y diplomáticos que han reconocido la jurisdicción emanada de dicha isla.
Esta negociación se debe hacer bilateralmente de manera que pueda ser reforzada con proyecciones de desarrollo a futuro ya que la mayoría de esas islas del Caribe son muy pobres.
Se debe tener mucho cuidado de subestimar el nivel de preparación de los representantes de las islas porque se puede ofender de manera irreversible la dignidad de los mismos, así como podemos nosotros perder más que ganar. Generalmente, a pesar de que son países muy pobres en su mayoría, se trata de negociadores muy bien preparados.
Se debe ubicar Venezuela en la posición de cada una de esas Islas con las que se va a negociar. Es necesario considerar que allí, Venezuela es vista como un Imperio y que debe ser muy sensible y al mismo tiempo firme en sus decisiones y propuestas.
Venezuela debe buscar, en otros aspectos, brindar la mayor ayuda a estos países, sobre todo durante el proceso de negociación y antes, ya que estos así eliminan de sí cualquier predisposición negativa que pudieran tener al respecto.
Ser conscientes de que ellos no van a aceptar petróleo ni ningún bien o beneficio temporal como modo de persuasión o parte de la negociación, ya que ellos están conscientes de que el territorio es para siempre, en cambio el petróleo se acaba.
Para finalizar, se necesita gestionar ampliamente estos procesos de delimitación, y se debe preparar muy bien el escenario antes. Hay que considerar que aunque Venezuela no firmó Montego Bay, todas estas Islas sí, y desde entonces muchas definiciones han cambiado. Es necesario contar con la buena voluntad de todos estos países vecinos y estar dirigidos hacia la búsqueda de una solución ganar-ganar.
Bibliografía Consultada:
MORALES PAUL, Isidro.(1983). “La Delimitación de Áreas Marinas y Submarinas al Norte de Venezuela”. Caracas: Academia de Ciencias Políticas y Sociales.
Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, 1982.
Una recomendación de las líneas de acción para la delimitacion con el caribe como tal no es tarea fácil puesto que el caribe ha aceptado propuestas de negociación temporalmente puesto a que nunca están conformes con las mismas.
Si bien es cierto muchas veces existen quienes piensan que por tratarse de zonas pequeñas y con poca población sus negociadores no son preparados, pues esto es un error porque los negociadores del caribe son persones altamente capacitadas que han estudiado en universidades de Canadá, Francia y Estados Unidos, los cuales no aceptan cualquier propuesta sin sentarse a analizar las desiciones que van a beneficiar en gran medida.
El caribe esta al tanto de que no produce lo suficiente para satisfacer sus necesidades, es por ello que están en la búsqueda de herramientas que no le solucionan un problema temporal, sino que le garanticen o le aseguren a largo plazo.
Por ejemplo Trinidad y Barbados tienen mejores recursos para vivir que el caribe oriental, y la diferencia radica en que el último mencionado vive de la cooperación internacional.
Así pues, que para delimitar con el caribe hay que actuar seriamente y decirle de manera directa cual es la posibilidad de que acepten delimitar con Venezuela
Nelly Mogollon
17.276.981
Fermín Barrios Rincón
C.I. V-16.674.501
Como ya han dicho mis compañeros, Venezuela sólo ha logrado concretar acuerdos fronterizos para delimitar las áreas marinas y submarinas con Estados Unidos, Países Bajos, Francia, República Dominicana y Trinidad y Tobago. Por ello restaría por delimitar en el Caribe oriental de norte a sur con San Cristóbal y Nieves, con el Reino Unido por su posesión de la isla de Montserrat, Dominica, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas y Granada. Aunque también merece mención especial el caso de Antigua y Barbuda que posee un peñón considerado por ellos como isla, denominado Redonda que generaría derechos sobre la jurisdicción del área marítima tomando en cuenta que ese peñón tiene la misma condición que Isla de Aves.
Así podemos identificar dos áreas en el Caribe oriental donde se presentan los conflictos para la delimitación, una es Isla de Aves y la otra es el Archipiélago de los Testigos, ambas tienen el mismo problema para ser reconocidas como islas por estos Estados caribeños. Por ello se deberían tomar dos medidas:
-En el caso de los Testigos a mi parecer podría resolverse más fácilmente que el otro caso, porque el Estado podría primero hacer una inversión para la construcción de un pequeño complejo turístico hotelero que tuviera capacidad para atender a unas 2000 personas anualmente, que es un número bajo y tendría un menor impacto en el ambiente, realización de eventos o juegos deportivos marítimos, además de la instalación de una base científica, todo ello para generar las condiciones necesarias para que se active la economía de ese archipiélago y pueda aumentar su población actual que se estima en 200 habitantes a unos 500, algo que podría hacerse realidad si se toma en cuenta que el área de Los Testigos es de poco más de 6 km2.
-En cuanto a Isla de Aves la situación es más delicada por lo pequeño de la isla y por la fragilidad medioambiental de la zona, sin embargo, existen proyectos desde la década de los ochenta en la Fuerza Armada Venezolana donde se estudia la posibilidad de expandir la isla, por medio de la construcción de arrecifes artificiales con la intensión de recuperar la extensión original de la isla que tenía para 1650 y que desde entonces se ha reducido al menos en un 70%. Con ello se lograría establecer centros científicos aparte del ya existente.
Comparto lo que dicen casi todos mis compañeros respecto a negociar de forma bilateral, pero esto es poco probable que ocurra, porque los Estados caribeños se sienten en desventaja frente a Venezuela, por ello si creo que se pudiera adelantar la negociación conjunta luego de aplicar esas dos medidas que he mencionado. Con ello se terminaría el reclamo que presentan Granada y San Vicente y las Granadinas, mientras que con el resto de los Estados caribeños tendremos lamentablemente que ceder parte de nuestra pretensión territorial en el Caribe, siempre que la frontera no pase del meridiano 64º80’ hasta el paralelo 13º00’, así quizás se podría solucionar el problema porque estos Estados no aceptarían seguir la misma línea recta firmada con Francia, especialmente Dominica porque según ellos es muy próximo a sus costas y es un área estratégica para su comercio.
Loreleidy Correa Millan
18680641.
Contexto limítrofe en áreas marinas y submarinas entre Venezuela y EEUU.
El Tratado de delimitación de fronteras marítimas entre Venezuela y los Estados Unidos de América, suscrito el 28 de mayo de 1978, y aprobado por Ley, es el primer instrumento jurídico celebrado por nuestro país en el área marítima, posterior al célebre Tratado que delimitó “el lecho y sub-suelo marino del Golfo de Paria” (Venezuela y Gran Bretaña, el 26 de febrero de 1942).
El objeto del Tratado fue delimitar las áreas marítimas ubicadas entre nuestra Isla Aves (ubicada a 500 kilómetros de Margarita), las islas que integran el anteportal venezolano (Archipiélago de Aves, Los Roques) con las islas bajo jurisdicción norteamericana (Puerto Rico y Santa Cruz). La línea limítrofe acordada, sin prejuzgar sobre la naturaleza jurídica de las áreas marítimas delimitadas, establece explícitamente la obligación de ambos Gobiernos de no reclamar ni ejercer, con propósito alguno derechos soberanos o jurisdicción al otro lado de la línea limítrofe.
El Tratado reconoce la totalidad de las áreas marítimas (Mar Territorial, Zona Económica, Plataforma Continental), de todas las islas venezolanas involucradas; Isla de Aves, Archipiélago de Aves, Archipiélago Los Roques, enfrentadas a las Islas de Puerto Rico y Santa Cruz, no obstante las diferencias geográficas y económicas que las caracterizan.
El Tratado contribuye a consolidar el control por Venezuela del Promontorio o Dorsal de Aves, cuya expresión exterior es, precisamente, Isla de Aves. El Tratado fue aprobado por unanimidad en el Congreso de la República y recibió el apoyo de todas las fracciones políticas y personalidades consultadas.
Delimitación entre Venezuela y los Países Bajos
Entre el Oeste de Aruba y Territorio Venezolano:
En este sector, la línea limítrofe sigue el meridiano 70º25’ Oeste, ubicado entre el archipiélago de Los Monjes, especialmente el Monje Este y la Isla de Aruba. Del punto 3º (Latitud 12º21’ N y longitud 70º25’ Oeste) por medio del meridiano 70º25’ Oeste hasta el punto Nº 2 de longitud 12º49’ Norte y longitud 70º25’ Oeste. Luego de la línea limítrofe se inclina en sentido Norte-Este, hasta el punto 1º de longitud 69º43’38’’ Oeste y longitud 15º24’48’’ Norte.
El meridiano 70º25’ esta más cerca de Aruba que de los monjes y le concede a Aruba aproximadamente 490 km2 de la Plataforma Continental, de los 590 km2 que hubiese abarcado la equidistancia, como lo aspiraban los Países Bajos, toda vez que el punto equidistante hubiese estado sobre el Meridiano 70º53’ de longitud Oeste. Este sector, sin lugar a dudas, fue el que exigió mayor esfuerzo por parte de las delegaciones negociadoras. La dificultad radicaba en que por una parte se trata de la única área en que la Isla de Aruba cuenta con un sector de Plataforma Continental con posibilidad de existencia de Hidrocarburos, en tanto que en el mismo concurre el interés vital de Venezuela de salir del Caribe por áreas bajo jurisdicción nacional. Podría argüirse que el meridiano de Punta Macolla, que representa la entrada natural del Golfo (70º13´Oeste) y cuando menos el de Punta Salinas (70º8´Oeste) hubiesen sido mejores soluciones para Venezuela. Incuestionablemente que sí. Ambas tesis fueron sostenidas por Venezuela, pero ambas fueron consideradas inadmisibles por la Delegación Neerlandesa, en base a las siguientes consideraciones:
1) El Meridiano que pasa por Punta Macolla (70º13´) corta el mar territorial de Aruba reduciéndolo a sólo 8 millas, en tanto que la Delegación venezolana exigía la totalidad del mar territorial, Plataforma Continental y zona económica exclusiva, para Los Monjes y las otras Islas Venezolanas: Isla de Aves, Archipiélago de Aves, etc. Al propio tiempo, se hubiese incurrido en un grave error y peligroso precedente al aplicar la tesis del enclave a una Isla de la importancia económica y política de Aruba (con 60.000 habitantes) de mayor importancia relativa que las Islas que conforman el anteportal venezolano.
2) El Meridiano de Punta Salinas (70º18´Oeste) limitaba la Plataforma Continental de las Antillas, en el sector de Aruba a 123 km2, de los 590 km2 que reclamaba la Delegación neerlandesa, por ser el área abarcada por una línea equidistante, Los Monjes-Aruba. La totalidad de la Plataforma Continental entre Aruba y Los Monjes al norte del Golfo de Venezuela, alcanza aproximadamente 1500 km2, por lo que el área de Plataforma Continental asignada a Aruba hubiese sido de apenas 8% del total.
En su proyección Nor-Este hasta el punto 1º, la solución queda aún más al Este (69º34´38´´Oeste) que el Meridiano de Punta Macolla (70º13´Oeste). Esta solución no sólo asegura una amplia salida al Caribe por una zona económica venezolana, sino que representa, al propio tiempo, un antecedente favorable frente a Colombia.
En el artículo 4, punto 8, se acuerda tomar de común cuerdo, las normas de prevención, reducción y control de la contaminación “en las rutas de navegación internacional ubicadas en el área marina que se extiende entre el archipiélago de Los Monjes y la Isla de Aruba”.
Por otra parte la solución le reconoce a Venezuela, una salida autónoma hacia el Caribe medio, toda vez que la línea limítrofe está ubicada a 489 km2 del Monje Este, valedera aun en la peor de las hipótesis de delimitación con Colombia. En el sector Norte la salida llega, en la línea media del Caribe a una extensión aproximada de 77.78 kilómetros, pudiendo eventualmente superar esa cifra, de acuerdo a la línea que en definitiva se adopte con Colombia.
Entre las Islas de Sotavento de las Antillas Neerlandesas (Aruba, Donaire, Curazao) y la Costa Norte de Venezuela:
En este sector la línea limítrofe debe ser dividida en dos sectores, un primer sector donde existe Solapamiento de mares Territoriales entre las costas de la Isla de Aruba y la Península de Paraguaná. En el punto donde es mayor la distancia entre las costas (22,5 millas náuticas), correspondieron a Venezuela 12 millas náuticas y a Aruba 10,5 millas náuticas. Una proporción similar se adoptó hasta otro punto, a partir del cual la línea limítrofe está ubicada en casi toda su extensión, al norte de la línea equidistante. Sólo un pequeño triángulo favorece a las Antillas, siendo compensado se seguida por otro triángulo favorable a Venezuela, tres veces superior. Al seguir el paralelo 11º40´ adopta igualmente una posición favorable, hasta llegar a un punto sobre el Meridiano de Puerto Cabello.
Entre Bonaire y el Territorio Venezolano:
Desde el punto latitud 11º40´00´´ Norte y longitud 67º59´23´´ Oeste, la línea limítrofe sigue por el meridiano de Puerto Cabello, esto es 67º59´23´´ Oeste hasta el punto latitud 12º27´00´´ Norte y longitud 67º59´23´´ Oeste. El meridiano escogido es tangente a las doce millas de mar territorial de Bonaire, por lo que las seis millas existentes entre los Mares Territoriales de Bonaire y el Archipiélago de Aves quedaron a favor de Venezuela. Del punto donde la línea limítrofe sigue una inclinación Nor-Este, un arco de circunferencia máxima hasta el punto de latitud 15º14´28´´ Norte y longitud 68º51´44´´ Oeste (Isla Saona-Curazao-Aruba). La línea de equidistante Bonaire-Aves hubiese tomado una inclinación Nor-Este, hasta un punto de longitud aproximada a 67º con gran desventaja para Venezuela. Es conveniente observar que se trata de delimitar tanto el mar territorial de 12 millas náuticas alrededor de las islas y el territorio continental, como las 200 millas náuticas de Zona Económica Exclusiva, 360º alrededor de la misma, lo que elimina la proyección tubular hacia el Norte que se produciría entre Aruba y Curazao si sólo se delimitase el Mar Territorial.
Entre las Islas de Aves, Saba y San Eustaquio:
La línea limítrofe sigue un arco de circunferencia máxima que une los puntos S.T. Croix-Saba-Aves (latitud 16º44´49´´ Norte y longitud 64º01´08´´ Oeste), Saba-S.T. Eustatius-Aves (16º40´50´´ Norte y 63º37´50´´ Oeste) y S.T. Eustatius-S.T. Christopher-Aves (latitud 16º40´01´´ Norte y longitud 63º35´20´´ Oeste), sobre el punto que sobre la misma circunferencia máxima resulte de la delimitación con terceros Estados. La línea escogida es una línea equidistante entre la Isla de Aves (Venezuela) y las Islas de Saba y San Eustaquio (Neerlandesas). La escogencia de la línea equidistante que divide por igual las áreas marítimas entre ambos países se explica, entre otras razones, por las siguientes: Por haber sido Isla de Aves reconocida como pertenencia de Venezuela por el Laudo Arbitral emitido por la Reina Isabel II de España con fecha 30 de junio de 1865. Como consecuencia del citado Laudo, Venezuela fue obligada a indemnizar a algunos pescadores holandeses que habitualmente operaban en el sector. En todo caso, esta solución es consecuencia de la negociación global considerada como todo, por lo que carece de sentido juzgarla aisladamente. El efecto de la Isla de Aves, sobre las áreas marítimas que la circundan es de 75.000 kilómetros cuadrados.
Conclusiones
A modo de conclusión se podría decir que se logró una solución justa, equilibrada y conveniente al ponderar adecuadamente los intereses vitales tanto de Venezuela como de los Países Bajos (Antillas Neerlandesas). Esta apreciación se robustece al ser examinada en el marco global de las relaciones de Venezuela con los Países Bajos y especialmente, con las Antillas Neerlandesas, con quien nos unen lazos históricos, sociales, económicos y políticos.
Se aplicaron los principios equitativos en el trazado de las diferentes líneas limítrofes, combinados con una pluralidad de métodos de delimitación de acuerdo a la variedad de circunstancias geográficas. (meridianos, paralelos, equidistancia, Plataforma Continental, etc.)
La asignación de áreas refleja las anteriores consideraciones, toda vez que, de los 14.000 kilómetros cuadrados hacia el Caribe Medio, a las Antillas Neerlandesas le correspondieron 74.000 km2, esto es el 64% del área total, en tanto que los 40.000 restantes, ubicados al Este y Oeste de las líneas limítrofes, quedaron a favor de Venezuela.
La distribución de áreas, al mismo tiempo, refleja razonablemente el criterio de proporcionalidad entre éstas y las áreas costeras involucradas, no obstante, que la proporcionalidad no ha sido considerada como un método autónomo de delimitación, sino como un criterio para apreciar la equidad del método empleado. Como lo señaló la Sentencia Arbitral Francia-Inglaterra “es la desproporción más que un principio general de desproporcionalidad lo que constituye el criterio o factor pertinente”.
La solución preserva la salida del Golfo de Venezuela y del Lago de Maracaibo hacia el Caribe, al asignarnos un área de 48,9 kilómetros entre la línea limítrofe y el Monje Este (Zona Económica Exclusiva).
La línea limítrofe adoptada entre las Islas de Aves-Saba-San Eustaquio, consolida el control de Venezuela sobre el Promontorio de Aves y sobre las áreas marítimas que circundan dicha Isla, las cuales alcanzan aproximadamente 75.000 kilómetros cuadrados.
El régimen de navegación adoptado, resguarda adecuadamente los intereses fundamentales de Venezuela en tan estratégica área, al reconocer, a partir de las tres millas de mar territorial de las Antillas, a) el paso en tránsito, es decir: la libertad de navegación y sobrevuelo para todos los barcos y aviones mercantes y de Estado Venezolano. b) Ese paso en tránsito no puede ser interrumpido por el Estado Costero, ni siquiera por razones de seguridad. c) Se aplica el mismo régimen para buque s y aeronaves mercantes de terceros países procedentes de o destinados a Venezuela. d) Los canales de navegación o rutas aéreas que puedan designar el Estado Costero no pueden constituir un obstáculo a la libre navegación, y e) toda medida contra la contaminación que pudiese afectar la navegación en el área, debe ser tomada de común acuerdo.
Las disposiciones relativas a estructuras minerales o similares cabalgando en la línea limítrofe, a) evitan, racionalmente, la eventualidad de que uno de los países limítrofes pueda ser perjudicado por la explotación realizada del otro lado de la línea limítrofe; b) establecen el procedimiento en virtud del cual se determinarán las características técnicas del yacimiento, así como su división proporcional entre los países limítrofes, etc.
Representa un valioso precedente a favor de los intereses vitales de Venezuela, en relación con otras delimitaciones pendientes de realizar, especialmente en relación a Colombia, República Dominicana, Francia, Gran Bretaña, etc. Asimismo, contribuye a consolidar la situación de las Islas Venezolanas y su ámbito de control sobre las áreas marinas y submarinas que les corresponden.
Se evidencia, una vez más, lo adecuado y pertinente del mecanismo de negociación diplomática directa para la solución de los más difíciles problemas fronterizos, sin necesidad de la intervención de terceros.
Delimitaciòn de Venezuela con los países del caribe.
Líneas de acción a seguir.
La república Bolivariana de Venezuela posee un conjunto de islas que delimitan con los países del caribe, la mayoría de estas fronteras marítimas están delimitadas (70%). Sin embargo existe otro conjunto de Estados con los que la republica aun no ha delimitado por distintas diferencias a nivel conceptual en lo que respecta al tema de la plataforma continental y la zona económica exclusiva de la isla de aves y el Archipiélago los testigos. Los países son los siguientes: Grenada, San Vicente, Dominica, Monserrat y Santa lucia.
La principal controversia con respecto a la isla de aves se da por el concepto de isla que le da la repùblica, el cual difiere del que le dan los Estados fronterizos con estas, estos le llaman “roca de aves”. Esta percepción se basa en el concepto de Isla que se da en la III convención del mar de la cuál Venezuela no es signataria. Allí se indico lo siguiente con respecto a islas:
“ARTÍCULO 121.- Régimen de las Islas: 1) Una isla es una extensión natural de tierra, rodeada de agua, que se encuentra sobre el nivel de ésta en pleamar. 2) Salvo lo dispuesto en el parágrafo 3, el mar territorial, la zona contigua, la zona económica exclusiva y la plataforma continental de una isla serán determinados de conformidad con las disposiciones de esta convención aplicables a otras extensiones terrestres. 3) Las rocas no aptas para mantener habitación humana o vida económica propia no tendrán zona económica exclusiva ni plataforma continental.”
Estos son los preceptos con los que no coincide la república aunque paradójicamente cumple con los demás cánones establecidos en dicha convención. En este caso la línea de acción a seguir es establecer una población fija en esos territorios, ya sea de carácter científico o militar y lo más importante es proceder a la exploración de las áreas terrestres, marinas y submarinas de que aduce la república poseer para que se entienda que si hay una ocupación y explotación de parte de la república que pueda servir de argumento para futuras delimitaciones.
Otro punto a acotar con respecto a ser esta línea de acción es el como se debe negociar con estos Estados insulares e indudablemente la nación debe ante todo buscar la negociación bilateral con cada uno de estos Estados( y por su puesto usar su ventaja como país continental), ya que en los últimos tiempos la negociación no ha resultado tan fructuosa principalmente por la suma de la Comunidad del Caribe (CARICOM) y de la Organización de Estados del Caribe Oriental (CECO) y esto es sinónimo de fortaleza para ellos y un punto en contra para Venezuela .
Otra estrategia a seguir seria la de usar a PETROCARIBE como un arma a la hora de negociar ya que Venezuela es el Estado fuerte de esa área de integración y el que ha tenido la iniciativa de armonizar las relaciones con esos Estados. Si Venezuela buscar un acuerdo favorable para ella usando como instrumento el flujo y relaciones comerciales con esas naciones como punto clave para no deteriorar las relaciones , a mi punto de vista , llevará una gran ventaja en la negociación. Recordemos las facilidades de pago que ofrece Venezuela a estos Estados y el gran alivio que resulto para ellos en tiempos de precios altos del petróleo pertenecer a PETROCARIBE.
En definitiva Venezuela no debe dejar perder las grandes riquezas que tiene la zona económica exclusiva y la plataforma continental y debe estar sigiloso ante las iniciativas de negociación de estos Estados para así no descuidar una Zona que en un futuro puede resultar de un gran provecho económico y un instrumento geopolítico de gran valor y esto se debe hacer mediante la negociación y dialogo que debe distinguir a un país grande con respecto a las demás Estados del Caribe.
CAROLINA RODRIGUEZ (16.083.850)
Venezuela es un país con dos fachadas: la marítima, que se orienta hacia el mar Caribe y el océano atlántico, y la continental, con tres frentes: el andino, el llanero y el amazónico. Ambas le dan ventajas económicas, geopolíticas y sociales a la nación. Luego de diversos debates e investigaciones necesarias a lo largo de nuestro semestre en la cátedra de Historia III, vemos que Venezuela ha pasado por un largo proceso de delimitación de su territorio debido al establecimiento de su soberanía, tanto continental como de aguas marinas. De esta manera, desde el año 1833 se han establecido diversos convenios y acuerdos con los países limítrofes, que han sido complementados con las disposiciones internacionales del derecho marítimo, las cuales han permitido establecer límites con diversos países en el mar Caribe.
La posición geográfica de nuestro país es de gran importancia estratégica, por ser uno de los países de Sudamérica que presenta un espacio oceánico y costero hacia el Caribe y una fachada abierta hacia el Atlántico. Se considera como una encrucijada vital para el tráfico marítimo, puesto que está rodeada de canales, pasos y estrechos que comunican la América del Norte con la del Sur y el Océano Atlántico con el Océano Pacífico.
Los espacios marítimos están constituidos por las Aguas Interiores, el Mar Territorial, la Zona Contigua, la Plataforma Continental y la Zona Económica Exclusiva. La República ejerce derechos exclusivos de soberanía y jurisdicción en los términos, extensión y condiciones que determinen el derecho internacional público y la ley.
Venezuela ha delimitado sus áreas marinas y submarinas por medio de Tratados de Delimitación, en el Mar Caribe y en el Atlántico con Trinidad y Tobago, lo cual representa aproximadamente, una superficie aproximada de 860.000 Km² de Zona Económica Exclusiva, donde el país tiene derechos de soberanía para la exploración, explotación, conservación y administración de los recursos naturales, del lecho y el subsuelo del mar.
Es importante destacar la ubicación del cordón de islas localizado al norte de la costa continental de nuestro país, por la importancia que tienen en las negociaciones para la delimitación de áreas marinas y submarinas efectuadas y pendientes por efectuar, puesto que dichas islas son generadoras de espacios marítimos contemplados en el Derecho del Mar. Especial relevancia revisten los Archipiélagos de Los Monjes, Las Aves, Los Testigos y especialmente la Isla de Aves situada a 500 Km al norte de la Isla de Margarita.
Están pendientes por delimitar áreas marinas y submarinas con las islas de Grenada, San Vicente y las Grenadinas, Santa Lucía, Dominica, Monserrat y St. Kitts-Nevis en el Caribe Oriental. Donde es necesario y conveniente ampliar y diversificar nuestra política exterior, ya que esta zona representa interés geopolítico para Venezuela y también un formidable reservorio natural de materias primas, razón por la cual es vital el inicio de acciones para brindarle seguridad y desarrollo basados en el nuevo derecho del mar. Por esa razón, no es inapropiado considerar que el área comparte un profundo interés geoestratégico tanto para Venezuela como para otras naciones del área caribeña, por ello es necesaria la búsqueda de negociaciones equitativas y bilaterales las cuales han quedado estancadas porque no se ha podido dirimir el tema de la jurisdicción marítima. La postura de Venezuela en cuanto a limites y soberanía ha sido rígida desde que por ejemplo en pos de la acentuación de la soberanía de Venezuela en Isla de Aves, en la reunión de CARICOM del 2001, el país puso de manifiesto su intención de construir una base militar en la Isla de Aves para sustituir a los únicos habitantes, hasta ese entonces, un grupo de científicos y militares venezolanos y de esa forma dar un claro mensaje de que nadie podía negar la propiedad de su país sobre este territorio. De manera que siguiendo un nuevo parámetro cooperativo Venezuela debe profundizar sus lazos con cada uno de los países que mantengan similar interés, en cuanto al territorio caribeño buscando acercamiento cooperativo que sea provechoso para Venezuela y nuestro interés económico a futuro.
FELIZ NAVIDAD!!! EXCELENTE GRUPO…
Líneas de acción a seguir por parte del Estado Venezolano en su delimitación con las demás islas del Caribe.
La zona del Caribe es sin duda alguna la ventana del continente suramericano, por ende se constituye en un área de importancia geopolítica clave para nuestro país. El Ejecutivo Nacional a través de la adopción de una política de Estado clara y firme, debe asumir la delimitación con las demás islas del Caribe como un acto de soberanía plena, teniendo en cuenta los principios del Derecho Internacional Publico y los compromisos adquirido previamente por la nación en esta materia.
Tomando en cuenta que Venezuela como país posee un PIB muy elevado y amplias zonas marítimas con respetos a las restantes islas del caribe, aspecto fundamental para que la opinión internacional en una supuesta negociación otorgara la ventaja territorial a los pequeños estados Caribeños, según mi lectura, el acto de plena soberanía llevado a cabo por Venezuela, seria pertinente encaminarlo en distintos ejes de trabajos, tales como:
• Adopción de tratados bilaterales en materia de delimitación con el objetivo dilatar el proceso de negociaciones conjuntas.
• Conformación de Grupos de estudio histórico y Juntas de Delimitación Bilateral bajo el espíritu de la solución pacifica de controversias mediante la negociación secreta, autónoma e independiente de cualquier factor externo.
• Implementar el ALBA y PETROCARIBE donde Venezuela se constituye pieza clave de influencia, como instrumentaos de acercamiento multilateral con estas islas en temas relacionados con la cooperación energéticas, agrícola, financiera, cultural, ente otros.
• Seguir fomentando la realización de ejercicios aeronavales conjuntos entre Venezuela y las Islas del Caribe que creen un escenario de cooperación militar efectivo en la zona, asumiendo el compromiso de garantizar la seguridad colectiva del hemisferio.
Estas propuestas podrían a mi entender plantear un objetivo claro del Estado Venezolano en el área del caribe de donde se desprende 2 aristas: 1- Delimitar y ejercer soberanía de forma bilateral y 2- Unir a estas islas en proyectos donde es Estado Venezolano tenga claramente mayor influencia.
Víctor Juárez.
c.i.18.269.259.
Delimitación de Venezuela con los países del Caribe.
Líneas de acción a seguir.
Jesse García
C.I.14157298
Según lo establece la Constitución De La República Bolivariana De Venezuela; en el Título II Del Espacio Geográfico y De La División Política. Capítulo I. Del Territorio y Demás Espacios Geográficos.
Artículo 11. La soberanía plena de la República se ejerce en los espacios continental e insular, lacustre y fluvial, mar territorial, áreas marinas interiores, históricas y vitales y las comprendidas dentro de las líneas de base rectas que han adoptado o adopte la República; el suelo y subsuelo de éstos; el espacio aéreo continental, insular y marítimo y los recursos que en ellos se encuentran, incluidos los genéticos, los de las especies migratorias, sus productos derivados y los componentes intangibles que por causas naturales allí se hallen.
El espacio insular de la República comprende el archipiélago de Los Monjes, archipiélago de Los Roques, archipiélago de La Orchila, isla La Tortuga, isla La Blanquilla, archipiélago Los Hermanos, islas de Margarita, Cubagua y Coche, archipiélago de Los Frailes, isla La Sola, archipiélago de Los Testigos, isla de Patos e isla de Aves; y, además de las islas, islotes, cayos y bancos situados o que emerjan dentro del mar territorial, en el que cubre la plataforma continental o dentro de los límites de la zona económica exclusiva.
Sobre los espacios acuáticos constituidos por la zona marítima contigua, la plataforma continental y la zona económica exclusiva, la República ejerce derechos exclusivos de soberanía y jurisdicción en los términos, extensión y condiciones que determinen el derecho internacional público y la ley. Corresponden a la República derechos en el espacio ultraterrestre suprayacentes y en las áreas que son o puedan ser patrimonio común de la humanidad, en los términos, extensión y condiciones que determinen los acuerdos internacionales y la legislación nacional.
Artículo 15. El Estado tiene la obligación de establecer una política integral en los espacios fronterizos terrestres, insulares y marítimos, preservando la integridad territorial, la soberanía, la seguridad, la defensa, la identidad nacional, la diversidad y el ambiente, de acuerdo con el desarrollo cultural, económico, social y la integración.
Atendiendo a la naturaleza propia de cada región fronteriza a través de asignaciones económicas especiales, una ley orgánica de fronteras determinará las obligaciones y objetivos de esta responsabilidad.
En base a estos parámetros es importante resaltar la importancia que radica para Venezuela la culminación exitosa de la delimitación pendiente en las áreas marinas y submarinas del Caribe. Su importancia a nivel geopolítico y geoestratégico es vital para los intereses futuros e inmediatos de nuestra nación, por todas las implicaciones de orden político, económico e internacional de esta zona. Recordemos que controlar esta zona de una manera legal y cónsona con las naciones caribeñas vecinas nos proporcionará múltiples beneficios por sus implicaciones económicas y geográficas, como corredor de salida y entrada de bienes y servicios desde y hacia Europa, los Estados Unidos de América y por supuesto el Caribe y América Central.
Las acciones a recomendar según mi criterio se basan en crear comisiones especiales que evalúen los mecanismos y argumentos que posee la interpretación dada por nuestra nación de los lineamientos a seguir con cada una de estas naciones en particular, a pesar de que éstas se resistan a negociar bilateralmente, sino solo en bloque, Venezuela debe de no poder lograr las negociaciones bilaterales, incentivar los mecanismos de integración hacia esta área del Caribe, como en el caso de PetroCaribe; buscando crear relaciones de intercambio comercial mas notables, lograr acuerdos de intercambio estudiantil, cultural y en materia de turismo, con lo cual se crearían bases para hacernos notar en estos países.
Venezuela se beneficia en la esfera internacional al contar con el apoyo de los países integrantes del CARICOM; ya que estos siempre representarán votos políticos en las Organizaciones Internacionales de envergadura; lo importante es obtener la visión de recrear en materia económica la búsqueda de los productos que puedan ser comercializados acá y los que Venezuela pueda introducir en estos mercados (no sólo el Petróleo); por la vía económica es que considero que pueda lograrse crear la confianza necesaria para dar término a estas delimitaciones que aún se encuentran inconclusas, ya que estos países insulares siempre se encontraran a la defensiva con respecto a Venezuela, es masa continental vs. masa insular, además de que históricamente nos hemos dado el lujo de ignorar casi por completo a nivel institucional crear acuerdos con esta área del Caribe, esto sin tomar en cuenta todas las diferencias culturales e idiomáticas existentes; con lo cual hay a pesar de la corta distancia geográfica que nos separa de Dominica, Granada, San Vicente, Santa Lucia, San. Kitts-Nevis y Montserrat un enorme abismo político, económico, cultural y social.
Es necesario dar impulsos a estas políticas ya que estos países considero no tendrán la iniciativa con respecto a Venezuela para dar conclusión a estos asuntos internacionales pendientes.
Es indispensable continuar con lo propuesto por Venezuela en su reserva de la Convención de Ginebra de 1958, su criterio de la equidad, lo que implica la no aceptación de la línea media o de equidistancia, ya que esta no nos favorece en estos casos.
Venezuela debe continuar elaborando estrategias políticas y comerciales dentro de su política exterior para la culminación satisfactoria en la delimitación de las áreas marinas y submarinas con respecto al mar Caribe y profundizar la implementación de convenios con estas naciones insulares para el mejor provecho de nuestro país ya que la existencia de recursos pesqueros, turísticos, comerciales e hidrocarburos son de especial importancia para incentivar el desarrollo de nuestro país reafirmando nuestra soberanía y presencia histórica en la región.
Elaborado Por El Br.Jesse García
C.I.14157298
Feliz Navidad Y Año Nuevo 2009!!! Para Ud. Profesora Brigitte Rivas y para todos los integrantes de este curso.
La fachada marítima venezolana alcanza 2.718 Km de litoral, la cual se proyecta con varios Estados como las Antillas Neerlandesas con la cual se logro la delimitación de fronteras con Estados Unidos de Norteamérica en 1978, con Francia en 1980 y Trinidad y Tobago en 1990, sin embargo existen otros Estados con los cuales aun no se han delimitado fronteras como es el caso de Granada, Dominica, Santa Lucia, San Vicente, San. Kitts-Nevis y Monserrat esto debido a que Venezuela no firmó La Convención sobre el Derecho del Mar de 1982, ya que se establecían criterios que atentaban con nuestra soberanía, como es el caso del artículo 121 de dicha Convención donde se establece lo relativo al régimen de las islas.
Por lo que es necesario para Venezuela en base a los errores cometidos en el pasado plantearse la necesidad de llegar a acuerdos para la delimitación de fronteras para lo que planteo debe establecerse una Comisión para establecer líneas fronterizas para cada caso, que no solo se encargue de conseguir el establecimiento de una Zona Económica Exclusiva y una Plataforma Continental, sino de la investigación científica militar, antipiratería marítima entre otros, esto debido a la importancia que esta área tiene en cuanto a recursos naturales y energéticos.
Es importante negociar con los países caribeños de forma bilateral y no en bloque mediante organismos como CARICOM para así asegurar una posición domínate de Venezuela en el proceso, que no se obtendría en una negociación en bloque. Buscar la negociación equitativa y bilateral con Dominica, Granada, Santa Lucía y San Vicente y no como Bloque como lo han ratificado por medio de
Venezuela debe seguir cooperando en otros ámbitos con los países caribeños como por ejemplo, el Petrocaribe y el ALBA, para la consecución de los objetivos otorgándoles el beneficio petrolero y el desarrollo económico a través de la complementariedad
Las negociaciones en torno a nuestra Isla de Aves no deben cesar, se debe seguir con la política exterior sobre la soberanía venezolana en la Isla de Aves y lograr obtener el reconocimiento internacional de Isla de Aves y del Archipiélago Los Testigos ya que tenemos ocupación efectiva en el caso de Los Testigos.
Referencias:
MORALES PAUL, Isidro.(1983). “La Delimitación de Áreas Marinas y Submarinas al Norte de Venezuela”. Caracas: Academia de Ciencias Políticas y Sociales.
MARQUEZ, Pompeyo. Los misterios de la frontera marítima y sur oriental.
LIXMAR MARTIN
CI. 18487926
Alfredo A. Alvarez P.
C.I. 18.809.579
Límites de Venezuela con el Caribe:
En cuanto a los limites que faltan por definir en el Caribe nos favorece el hecho de haber firmado acuerdos con los Estados Unidos en 1978 (a razón de las islas de Puerto Rico), con los Países Bajos en 1978 (a razón de las Islas Saba y San Eustaquio al sureste de Puerto Rico) y con Francia en 1980 (a causa de las Islas Guadalupe y Martinica) que reafirman el reconocimiento por parte de ellos de Isla de Aves como punto de referencia en el trazado de los limites de areas marinas y submarinas.
Si no existiese Isla de Aves quizás las fronteras marítimas que ha acordado Venezuela mediante tratados no se expandieran hasta tales distancias, he ahí la importancia geoestratégica de mantener firme la posición de la República de no aceptar las disposiciones del Acuerdo Montego Bay de 1982 ya que nos desfavorece en torno al concepto de Isla y del mismo modo conservar la posición de considerar a Isla de Aves dentro de esa condición para las negociaciones restantes con las antillas del Caribe que faltan por precisar.
San Cristóbal y Nevis además de Monserrat (Gran Bretaña) constituyen uno de los vacíos limítrofes con Venezuela en áreas marinas y submarinas. Estos se encuentran al sur este de San Eustaquio (Holanda) y al nor oeste de Guadalupe (Francia) que ya establecieron demarcaciones con respecto a Venezuela como fue aludido con antelación. Es probable que por su cercanía con Isla de Aves, San Cristóbal y Nevis además de Monserrat no estén interesadas en constituir acuerdos limítrofes con Venezuela si se toma como referencia a Isla de Aves, debido a la visión que no reconoce a ésta el carácter de Isla.
En el caso de Dominica por encontrarse entre Guadalupe y Martinica (las cuales han delimitado con Venezuela anteriormente), no tendría muchas opciones para objetar plegarse a la continuación de esa línea establecida con la República Francesa, además de Santa Lucía y San Vicente que tampoco han fijado limites en relación a Venezuela.
Por otra parte, con respecto a Granada debe prevalecer lo continental sobre lo insular, nuestros puntos a favor son la extensión de nuestra plataforma continental así como la presencia del Archipiélago de los Testigos que se ubica al sur este de Granada generando derechos sobre el mar; ello sin contar que Venezuela firmó un acuerdo de limites en 1991 con Trinidad y Tobago la cual se encuentra localizada al sur de Granada.
En las anteriores delimitaciones descritas se observa un trazo recto de norte a sur que va desde las demarcaciones de Venezuela con Guadalupe y sigue una parte discontinua antes de pasar por los confines de Martinica; este lindero pudiera tener continuidad hasta llegar al este de Granada y de ahí encontrarse con los limites establecidos entre Venezuela con Trinidad y Tobago.
Respecto a los límites que falta por definir es mejor tener como estrategia, primero delimitar con Granada, pues de ser satisfactoria para Venezuela tendremos concretado el extremo sur de la línea recta que viene desde Guadalupe y pasa por Martinica; de esta manera ello le mostraría a Santa Lucía y San Vicente (ambas al norte de Granada y al sur de Martinica) que sin tener muchas complicaciones en la demarcación pueden adherirse a la continuación de la línea descrita desde Martinica (en el caso de Santa Lucía) hasta conectarla con la línea de delimitación de Venezuela con Granada (en el caso de San Vicente).
Finalmente, un aspecto no menos importante es la necesidad de establecer a la brevedad posible límites con las antillas del Caribe mencionadas anteriormente que faltan por definir puesto que Isla de Aves por el hecho de no sobresalir encima del nivel del mar cuando sube el pleamar es un aspecto desfavorable para Venezuela del cual se han apoyado varios países para no reconocer a Isla de Aves dentro de la categoría de “Isla” bajo las disposiciones de la Convención de las Naciones Unidas sobre Derecho del Mar de 1982 (de la que Venezuela no es parte), en ese sentido, con los cambios climáticos que experimenta la tierra actualmente no sería descabellado pronosticar para un futuro no muy lejano el peligro que representaría el aumento del nivel del mar y la posibilidad de que Isla de Aves quede sumergida permanentemente bajo el nivel del mar, lo cual, pudiera dificultar mantener el argumento del derecho que posee Venezuela a una zona económica exclusiva derivada de la presencia de la isla debido a que de ser posible esa eventual circunstancia Isla de Aves no fuera considerada mas que un pequeño promontorio en medio del Caribe y esa situación podría colocarnos en peores consecuencias si no existiese tratado suscrito con antelación que haga constancia de una fijación de limites tomando como referencia a Isla de Aves.
Alfredo A. Alvarez P.
C.I. 18.809.579
La fachada marítima venezolana alcanza 2.718 Km de litoral, la cual se proyecta con varios Estados como las Antillas Neerlandesas con la cual se logro la delimitación de fronteras con Estados Unidos de Norteamérica en 1978, con Francia en 1980 y Trinidad y Tobago en 1990, sin embargo existen otros Estados con los cuales aun no se han delimitado fronteras como es el caso de Granada, Dominica, Santa Lucia, San Vicente, San. Kitts-Nevis y Monserrat esto debido a que Venezuela no firmó La Convención sobre el Derecho del Mar de 1982, ya que se establecían criterios que atentaban con nuestra soberanía, como es el caso del artículo 121 de dicha Convención donde se establece lo relativo al régimen de las islas.
Por lo que es necesario para Venezuela en base a los errores cometidos en el pasado plantearse la necesidad de llegar a acuerdos para la delimitación de fronteras para lo que planteo debe establecerse una Comisión para establecer líneas fronterizas para cada caso, que no solo se encargue de conseguir el establecimiento de una Zona Económica Exclusiva y una Plataforma Continental, sino de la investigación científica militar, antipiratería marítima entre otros, esto debido a la importancia que esta área tiene en cuanto a recursos naturales y energéticos.
Es importante negociar con los países caribeños de forma bilateral y no en bloque mediante organismos como CARICOM para así asegurar una posición domínate de Venezuela en el proceso
Venezuela debe seguir cooperando en otros ámbitos con los países caribeños como por ejemplo, el Petrocaribe y el ALBA, para la consecución de los objetivos otorgándoles el beneficio petrolero y el desarrollo económico a través de la complementariedad
Las negociaciones en torno a nuestra Isla de Aves no deben cesar se debe lograr obtener el reconocimiento internacional de Isla de Aves y del Archipiélago Los Testigos ya que tenemos ocupación efectiva
LIXMAR MARTIN
CI. 18487926
Para lograr abordar y comprender la postura adoptada por Venezuela con relación a los otros países del Caribe en lo que establece la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, 1982 es que nuestro país aún no ha logrado delimitar sus fronteras en aguas territoriales con sus vecinos caribeños, esto en parte debido al hecho de que Venezuela no quiso firmar dicha Convención, debido a que en la misma se planteaba de que Isla de Aves no era una isla sino una roca, perdiendo así toda jurisdicción marítima (articulo 121 de la Convención del derecho del mar); dando como resultado el resquebrajamiento en cuanto a las relaciones diplomáticas con sus países vecinos del Caribe: St. Kitts-Nevis , Dominica, Santa Lucía, San Vicente, Granada y Monserrat quienes tienen una reclamación territorial sobre Isla de Aves y el Archipiélago Los Testigos.
Venezuela posee una fachada insular marítima paralela a su costa y que esta conformada por tres grupos de islas: en el primer grupo se encuentran islas, islotes y cayos costeros que le pertenecen a los parques nacionales; en el segundo grupo (fuera del mar territorial) lo componen los Archipiélagos Los Roques, Los Monjes, La Orchila, Los Hermanos, Los Testigos y las Islas La Tortuga y la Blanquilla. Acá la soberanía de Venezuela data históricamente de 1777 a través del Iuti Possideti juri, en lo que correspondía a los territorios de la extinta Capitanía General de Venezuela. El tercer grupo que se halla en el punto más distante de la Venezuela continental se halla Isla de Aves y en donde la soberanía de Venezuela nace de la Real Cédula de 1777 en la Capitanía General de Venezuela y al cual se suman varios tratados firmados con EE.UU., Francia y Holanda; sin embargo hay estados caribeños que no reconocen la soberanía de nuestro país sobre Isla de Aves. Venezuela ejerce una negociación limítrofe con cuatro países vecinos: Dominica, St. Kitt-Nevis, Monserrat y Santa Lucía, quienes alegan que Isla de Aves no es una Isla sino un islote o roca. Mientras Granada y San Vicente alegan que el Archipiélago Los Testigos atentan contra sus intereses marítimos.
Dentro de toda esta dinámica Venezuela expone 6 objetivos marítimos que sirven de sustento para la política exterior venezolana hacia el Caribe:
1- El carácter vital de ese espacio queda reflejado en que Venezuela lo utiliza para el transporte del 98% de sus exportaciones y el 95% de sus importaciones.
2- La explotación comercial de la ictiofauna marina y de los bosques de mangle, con el conglomerado industrial para darle valor a las materias primas de nuestros ecosistemas caribeños.
3- La explotación de los hidrocarburos subyacentes en la Zona Económica Exclusiva a través de la instalación de plataformas de perforación y distribución de productos derivados.
4- El desarrollo de una infraestructura para el turismo, en el aprovechamiento de los diversos escenarios marítimos.
5- La instalación de sistemas científicos de observación, estudio y vigilancia de los ecosistemas costeros y marítimos.
6- La defensa y seguridad a través del fortalecimiento de la flota para garantizar el control de la navegación y de los recursos.
Con el criterio planteado por la Convención del Derecho del Mar 1982, en donde se establece que Isla de Aves no es una Isla, sino una roca, Venezuela perdería su Zona Económica Exclusiva de más de 75.000 km2, generando el denominado “Efecto de Isla de Aves”, el cual no permite a nuestro país bajar la guardia en cuanto a su custodia y sus dimensiones, tratando de mantener el control sobre el mismo. Para la fecha se ha logrado delimitar un 70% de las fronteras marítimas gracias a los tratados en materia de delimitación suscritos con EE.UU., Holanda, Francia, República Dominicana y Trinidad y Tobago; dándose la base de que los países caribeños negocian en bloque y no bilateralmente.
BIBLIOGRAFIA:
• TORREALBA, Alfredo: Áreas de interés de Venezuela en el Caribe: El conflicto de Isla de Aves y Archipiélago Los Testigos y la Convención de la ONU sobre el Derecho del Mar 1982.
Johana Moreno M.
C.I.: 14.388.748.
MANEJO DIPLOMÁTICO DE VENEZUELA EN EL CARIBE
La primacía de este tema no recae solo en poseer la zona costera mas amplia de todo el mar caribe (2.500 km aproximadamente) sino que con ello nos encontramos rodeados de un arco de fronteras con estos Estados Caribenos, que nos exige imperiosamente para el mantenimiento de buenas relaciones: reglas claras.
Es pertinente destacar la diversidad cultural existente entre estos actores y con ello las diferentes formas de llevar a cabo sus políticas de delimitación. De esta forma ya nuestra Republica a establecido convenios con los Estados Unidos, Trinidad y Tobago, Holanda (Aruba, Curacao y Bonaire), Francia (Martinica y Guadalupe) y Republica Dominicana. No presentándose el mismo escenario con Santa Lucia, Granada, San Vicente y Dominica, por sus reclamaciones en cuanto a la clasificación o no de isla a la “isla de aves” que bien han sabido alegar mis compañeros las razones de porque considerarla una roca o una isla según el Art. 121. de la convención del derecho del mar (1982).
La política a aplicar con estos últimos Estados debe ser sin duda alguna, la de un trato bilateral, tomando en cuenta la importancia continental de nuestro país, es así como puntualmente nuestra negociaciones con estos deben partir de la posesión de Isla de Aves y Los Testigos respectivamente.
El manejo diplomático actual llevado por nuestra Republica Bolivariana en el Caribe, no es vano, ni por mero lobby, es darle la importancia geopolítica que tiene y amerita el Caribe a nuestra nación, como bien ya lo decía Bolívar y bien lo resalta nuestra carta magna para nuestros procesos de integración latinoamericana, mas allá de las delimitaciones, hablamos de balanzas de poder en el continente. Ignorar esta estrategia seria analizar de manera simplista la situación, si observamos el peso en votos en la OEA que nos garantiza petrocaribe, con las políticas que desea y a llevado a cabo nuestro gobierno en la región como promotor de una integración no solo diferente sino mas conveniente a las diversas realidades coexistentes en la región.
PORTILLO, Diana
C.I.: V- 18.604.013
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